Desde que iniciaron los años de lo políticamente correcto, las cintas que tocan temas sobre el racismo y la discriminación se volvieron mucho menos frecuentes, más que nada por el temor general a ser ofensivos. Sin embargo, en estos últimos tiempos se han vuelto un poco más frecuentes, aunque siempre en una forma en que los grupos minoritarios recibieran un trato positivo. Es precisamente dentro de esta perspectiva que Steve McQueen se lanza a adaptar una novela con esta temática. En esta cinta, un hombre negro de los estados abolicionistas es secuestrado y vendido como esclavo en el Sur. A pesar del mensaje positivo hacia los afro-americanos, el tema de la Guerra Civil sigue siendo algo espinoso, por lo que mezclarlo con la cuestión racial seguramente provocará comentarios entre el posible público, que atraerá gente a taquilla. Por otro lado, el tema toca una realidad de aquellos años que casi nunca se abordaba, por lo que tiene varias cosas a su favor para llamar la atención en taquilla.