Si bien la cinta 47 Ronin está llamando la atención en casi todo el mundo, y está generando expectativas, lo cierto es que uno de los mercados internacionales más fuertes no está luciendo muy prometedor: Los espectadores asiáticos, en especial los japoneses, la tienen entre las menos buscadas para los próximos estrenos, aunque tampoco existe un rechazo o antipatía, simple desinterés, aunque para efectos de ventas, es exactamente lo mismo.Lo cierto es que esta cinta de Carl Rinsch es un remake de uno de los grandes clásicos del cine nipón, y el haber cambiado la trama para hacer que la estrella fuese un blanco no está entusiasmando tampoco a este sector del público. Si bien las ganancias esperadas para Occidente son más que suficientes como para garantizar el éxito de la cinta, lo cierto es que en un mundo globalizado, todas las cifras cuentan, y el perder atracción en todo un continente seguro hará mella en las expectativas de Hollywood.