Del mismo modo que una mala premisa puede convertirse en una muy buena película si se le da el tratamiento adecuado, una muy buena puede dar lugar a una cinta pésima. Este es el caso del film al que nos referimos, en donde un perdedor irresponsable se encuentra de pronto en un viaje inesperado, teniendo como única compañía a su nieto. Sin embargo, lo que parece ser la promesa de una road movie que explorará la brecha generacional, y permitirá un gran juego interiorista, se viene abajo cuando no solo vemos que el equipo de Jackass está tras de él, sino que lo anuncia orgullosamente en su propaganda. Los que tuvieron la oportunidad - o desventuras - de ver el trailer que se lanzó en agosto pasado, habrán podido darse cuenta que, en realidad, a pesar de pretender tener un guión algo más elaborado, el director Jeff Tremaine apenas pretende disfrazar un poco la temática general de este tipo de cintas, lo que no deja realmente nada que jutifique el gastar para verla. Si piensas perderte alguna película entre los lanzamientos de octubre, lo mejor es que sea ésta.