Durante años, Do Androids Dream of Electric Sheep? se consideró un libro clásico en la ciencia ficción, aunque el hecho de tener un círculo muy limitado de seguidores hacían algo arriesgado el llevarlo a la pantalla. Sin embargo, para 1982, el director Ridley Scott decidió probar suerte y, en ese año, lanzaría Blade Runner. Si bien no retoma exactamente la línea de la novela, mantiene la esencia básica de la misma, que es el descubrir los elementos que nos hacen humanos comparándolos con la conducta de las máquinas. Si bien la estrella de la cinta era el - en aquel entonces - novel actor Harrison Ford, la interpretación que hace Rutger Hauer de uno de los replicantes sigue siendo uno de los grandes momentos del género.