Hay películas que si bien no tienen un enorme éxito en su estreno, con el paso de los años alcanzan un estatus de obra de culto. Esto sucedió con la primera adaptación al cine de Cementerio de animales, el libro de Stephen King, cuyos títulos en español fueron Cementerio maldito, El cementerio viviente y Cementerio de mascotas.
No es la primera vez que se comenta que una nueva adaptación de uno de los libros más importantes del escritor podría llegar al cine. De hecho, en 2015 Guillermo del Toro afirmaba lo siguiente: "Cementerio viviente de Stephen King. Implacablemente oscura y emocional. Lectura compulsiva. Mataría por hacer una película".
No está claro si el director que este año estrenará La forma del agua todavía tiene planes de hacer una nueva versión cinematográfica del libro, pero otro cineasta podría adelantarlo. Andrés Muschietti, director de It, la nueva adaptación del terrorífico libro del escritor, afirma que quiere adaptar también Cementerio de animales.
De hecho, ha adelantado que tanto él como su hermana Bárbara Muschietti, productora de su próxima pelea sobre el payaso más terrorífico del mundo, empezarán a trabajar en la nueva versión en cuanto puedan. De momento no es un proyecto oficial, pero no cabe duda de que podría ser una buena idea, dependiendo del éxito de It.
A continuación les adelantamos una sinopsis de la historia que relata el libro.
Church estaba allí otra vez, como Louis Creed temía y deseaba. Porque su hijita Ellie le había encomendado que cuidara del gato, y Church había muerto atropellado. Louis lo había comprobado: el gato estaba muerto, incluso lo había enterrado más allá del cementerio de animales. Sin embargo, Church había regresado, y sus ojos eran más crueles y perversos que antes. Pero volvía a estar allí y Ellie no lo lamentaría. Louis Creed sí lo lamentaría. Porque más allá del cementerio de animales, más allá de la valla de troncos que nadie se atrevía a trasponer, más allá de los cuarenta y cinco escalones, el maligno poder del antiguo cementerio indio le reclamaba con macabra avidez.
Fuente: Cinemanía