Cuando se habla del cine de horror, los nombres de los más diversos directores y creadores surgen inmediatamente en la conversación, y pueden surgir acalorados debates. Sin embargo, existen nombres en los que todos están de acuerdo, y uno de los más identificados es el británico Clive Baker.
Nacido en 1952, no sólo es uno de los cineastas más reconocidos del género, sino además es un destacado novelista, dramaturgo, ilustrador y pintor reconocido dentro del género de terror. De hecho, prácticamente ha incursionado en todas las formas del horror, como cine, prosa, televisión, comics, videojuegos o RPGs.
Baker comenzò su carrera escribiendo historias cortas para diversas revistas de horror en Inglaterra, hasta que logró publicarlas en una recopilación llamada Books of Blood, que se convirtió en un éxito casi de inmediato, catapultándolo al éxito.
Aunque tiene una obra muy prolífica, es usualmente más conocido por sus obras Hellraiser y Candyman, ambas llevadas al cine, y convertidas en clásicos del género. Sus obras plásticas suelen ilustrar sus propios libros, y algunas de ellas se han expuesto en galerías de su natal Inglaterra y Estados Unidos.
Durante esta contingencia, puedes darte la oportunidad de leer algunas de sus historias, o sumergirte en cualquiera de sus filmes. Sólo no lo hagas antes de dormir.