Coraline y la Puerta Secreta, excelente doble lectura

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Escena de Coraline y la Puerta Secreta
Escena de Coraline y la Puerta Secreta

Desde hace tiempo, los creadores de animación han cuidado mucho más sus producciones para llegar al público adulto, al grado incluso de descuidar a su sector original, que era el de los niños. En ese sentido la cinta de Henry Selick demostró que puede moverse perfectamente en esa doble lectura que se necesita actualmente. Visualmente, Coraline y la Puerta Secreta simplemente cautiva a los niños, que si bien pueden llegar a captar sin problemas la trama, eso no significa que sea simple. De hecho, todo el simbolismo manejado alrededor de las relaciones de familia capturan sin problema a los mayores, lo que la hace una cinta muy recomendable para todo tipo de público. Realmente no conviene perdérsela.