Critica: Blue Jasmine, Wooddy Allen regresa con una bomba brutal

Después de su último filme De Roma con amor quedamos con un vacío del tamaño de la originalidad de Woddy Allen, este director judío que se ha aventurado a realizar un film por año cosa que esta logrando a pesar de que ya rebasa los 70 años. Sin embargo a lo largo de su trayectoria este maestro del cine nos ha dado grandes joyas como Manhattan, la rosa púrpura del Cairo, Vicki Cristina Barcelona por la cual empezó su tour por algunas ciudades muy representativas de Europa, siguiendo con Media noche en París, filme que le mereció de nuevo el reconocimiento de la crítica así como del publico.

Ahora nos entrega un drama con tintes de comedia acerca de una mujer, esposa de un importante inversionista de Nueva York que después de vivir en el lujo al cual su marido la tenía acostumbrada debe vivir con su hermana, viviendo el contraste de su vida como rica y ahora que debe mantenerse sola. Allen recrea de cierto modo el clásico teatral Un tranvía llamado deseo al narrar la historia de Jasmine que superpone a Blanche de Tennesse Williams, tratando con altanería a su anfitriona  y estovar en las vidas de su hermana y su novio Chili que emula un poco a Kowalski pero mucho más ligero en su lectura.

El realizador octogenario no suelta toda la carne al asador durante el filme, su recurso para mantener al espectador pendiente del futuro de Jasmine  y el saber por qué se encuentra en esa situación tan desesperante es la inserción de flashbacks que dan muestra de la vida del personaje en sus mejores años antes de su tragedia, y la cinta parece emular esas historias que nos conmovieron como Interiores que explora las reacciones humanas ante la adversidad y pone a prueba el aguante del personaje llevándolo al extremo de la desgracia muchas veces moral y en este caso económico y mental sin caer en la burla fría a pesar que, como ya mencioné hay escenas memorables "pueden guardar silencio, no sé por que diablos mi xanax no está funcionando" donde sientes pena por Jasmine pero Cate lo hace tan bien que respetas la crueldad del guión pero con una gracia poco común.

Durante el filme se presentan situaciones cómicas a las que el realizador nos tiene acostumbrados, pero esta vez la tragedia de su principal personaje es brutal y cruel. Cate Blanchet es increíble como Jasmine, hizo un personaje redondo con muchos matices donde todo desde los planos, la fotografía y los demás actores la hacen lucir como nunca. Tenía mucho desde Match point que Allen no golpeaba tanto a un personaje, algo que se agradece y se disfruta muchísimo.

No hay muestra internacional de cine en la Cineteca Nacional sin un filme de Woody Allen, y se exhibirá hasta el domingo 17 de noviembre de 2013 y su corrida comercial esperemos sea larga. Me atrevo a decir que Cate Blanchet será nominada como mejor actriz por su actuación tan neurótica y dramática que puede llegar a ser odiosa e inaguantable pero al mismo tiempo logras hacer empatía con ella en algunas situaciones.