Ryan Gosling siempre se ha encargado de escoger perfectamente sus personajes, de modo que se ha ganado el respeto del espectador, pero en El lugar donde todo termina aunque su actuación es meramente ocasional, es extraordinario.
Luke (Ryan Gosling), es un motociclista profesional que regresa a su ciudad natal encontrándose con su pasado. Al estar terminando su show se acerca a él una mujer que no sabia había tenido un hijo resultado de una noche de fiesta, dejándola con la carga. De algún modo Luke se entera que tiene un hijo, y en la urgencia de ofrecerle lo mejor se dedica a robar bancos. Se cruza con Avery Cross (Bradley Cooper), policía local que lo persigue después de un atraco, causando consecuencias letales para todos.
Un filme dirigido por Derek Cianfrance (Triste san Valentín), te muestra de forma brutal las consecuencias de las decisiones y como nuestras generaciones futuras se vuelven presas de los resultados de nuestras vidas. Con actuaciones fuera de glamour, este filme se vuelve un relato devastador de como el tomar el camino incorrecto no sólo nos afecta individualmente, también es una bomba expansiva que puede tocar a nuestros hijos. El rencor y la violencia se apoderan de los personajes causando un legado de odio entre los que vienen más adelante.
Paralelamente nos describe de forma fehaciente que vivimos en un sociedad que trabaja una doble moral, juzgamos al ladrón de un peso, pero en cuanto se presente una oportunidad de hacer lo incorrecto haciéndolo parecer lo contrario lo haríamos sin miramientos. Un película donde el hacer lo honesto trae una cadena de eventos inesperados, y no porque la honestidad traiga malas consecuencias perse, sino que el propio ser humano lo corrompe haciéndolo a su manera.
Ya en triste San Valentín hemos visto estas texturas grises, situaciones que inevitablemente sucederán arrastrando a sus protagonistas a lugares que nunca se imaginaron. La fotografía es casi claustrofobia, tomas cerradas nos dan a entender las cuatro paredes en las que se encuentran los personajes, no siendo estas físicas sino morales y espirituales de las cuales desgraciadamente no hay escape visible. Eva Mendes nos entrega un trabajo de soporte espectacular, la típica mujer latina indocumentada, atormentada por el diario vivir tratando de sobrellevar su situación de mujer soltera junto con su madre y su bebé.
Durante la primera hora Gosling es el punto medular de la película-el causante de todo- pero después el punto central del filme es Bradley Cooper como Avery Cross un policía honesto que se ve involucrado en delitos sin darse cuenta, causados por sus compañeros de cuartel de policia, infringiendo dolorosas situaciones a la familia de él y Gosling.
Una historia a mi parecer muy moral, que muestra el resultado de la vida al tomar malas decisiones. Un guión muy oscuro que no busca finales felices, sino simplemente trata de retratar la vida tal cuales, sin adornos aparentes ni situaciones rosas, siendo esta la realidad que nos golpea cada día, el enfrentar la resolución del tiempo a nuestras acciones.
Lo excelente: Una muy buena historia que trastoca fibras sentimentales y que invita a la reflexión.
Lo bueno: Un duelo de actuaciones que te golpean una a una y no sabes cual es la mejor.
Lo malo: Que en nuestro país tuvo muy poca difusión y sólo sigue en muy pocos cines.