Crítica: Sinister

Esta película del género de terror del año 2012 quiere dar una vuelta de tuerca a las películas de posesiones, maldiciones y casas de terror. ¿Lo consigue? No estoy seguro. Lo que creo que es un filme bastante efectivo y honesto en lo que se propone, y aunque no es quizás nada nuevo, Sinister puede ser un soplo de aire fresco.

Antes que nada, vamos con el argumento y protagonistas. Un escritor viaja con su familia a lo largo y ancho del país para investigar terribles asesinatos que luego convierte en libros. Cuando llega a una casa donde ha tenido lugar el asesinato de una familia, encuentra una cinta que desvela horribles pistas que van más allá del esclarecimiento de la tragedia. Esta película está dirigida por Scott Derrickson, quien también firma su guión junto a C. Robert Cargill. Los protagonistas son Ethan Hawke, James Ransone y Juliet Rylance.

Una de las características principales de este filme es que se centra en los personajes por encima de la trama. Eso puede hacer que la historia pierda fuerza, que es lo que sucede, pero también hace que conozcamos más a los personajes y eso se agradece. Ya que en la mayoría de películas de terror se centra tanto la trama que apenas sabemos nada de los personajes.

En cuanto a los personajes. Hay que decir que tanto el personaje protagonista como el ayudante de policía están bastante bien, quizás no tanto el resto, pero ellos llevan muy bien el filme sobre sus hombros.

Otra cosa que hay que agradecer es el saber incluir a los niños en el filme, aunque verdaderamente no sean parte protagonista de él hasta el final de la película. Por un lado tenemos al niño, quien con sus "terrores nocturnos" nos da algún susto que otro y la niña, de la que no os hablaré por si acaso no habéis visto el filme.

Lo cierto es que el filme es bastante sencillo, pero bien dirigido y muy bien interpretado por un gran Ethan Hawke. Lo más destacable son los terroríficos vídeos caseros. Si bien no es la primera vez que los vemos, en esta ocasión dan realmente miedo y es un gran punto a favor en la película.