Uno de los grandes problemas que suelen enfrentar los amateurs, es el filmar en las calles, pues usualmente se requiere de varios movimientos burocráticos que pueden quitar demasiado tiempo, y hacer la producción muy complicada. Sin embargo, los permisos no son siempre 100 % necesarios, aunque si son algo restrictivos. Hoy abordaremos en que circunstancias puedes filmar en el exterior sin problemas.
Cuando no entorpezca el paso de peatones o automovilistas: Si no instalas dollies o luces, no detengas el tráfico, u ocupas demasiado tiempo la banqueta, o estorbas a los transeúntes, no requiere permiso. El problema puede ser si la gente se detiene a observar, lo que necesariamente obstruye el tráfico, por que es mejor hacer secuencias cortas, e intentar no repetirlas demasiado.
Mientras no escandalices, alteres el orden público o amenaces la integridad de bienes o personas: Si no piensas que tus actores griten o reaccionen violentamente, saques a relucir armas - aunque sean de utilería - durante la toma, golpees algún poste o arrojes objetos, podrás filmar sin problemas.
No filmar o fotografiar edificios sensibles: Bancos, delegaciones, galerías y otros lugares que pudieran ser sujetos a asaltos o ataques no pueden ser filmados dentro o frente a ellos sin un permiso escrito. Si no aparecen en tu toma, no hay problema.
No filmar dentro de espacios históricos o de importancia cultural o natural: Parques, casas de la cultura, monumentos y otros puntos pueden ser considerados lugares de importancia cultural, y deberás de obtener permiso casi por necesidad. En algunos casos, tendrás que solicitarlo a nivel federal, pues algunos de ellos están más allá del alcance de la delegación.
Sin embargo, sigue siendo necesario que tengas cuidado, pues ciertos puntos como alterar el orden público o bloquear el paso son algo nebulosos, por lo que debes de asegurarte de no dejar ningún hueco o, en caso contrario, no correr riesgos, y acudir a la delegación por un permiso.