El problema de una idea original es que, una vez que se ha visto que funciona, se repetirá hasta la nausea, dándole apenas las variaciones mínimas, hasta que acaba convirtiéndose en un cliché. Tras de la explosión de los simpáticos patanes que poblaron las cintas estudiantiles de los setentas y ochentas, en los noventas se decidió darle un vuelto, contando historias en donde las muchachas eran ahora las rebeldes. Diva Adolescente es la enésima repetición de esta fórmula, aunque ahora se clava mucho más en los estereotipos. La chica cool estadounidense que acaba en un colegio británico, pero que a pesar del rechazo inicial, su estilo desenfadado y moderno - traducción, banal - acaba convirtiéndola en la más popular, alterando las reglas del colegio. Además de ser otra cinta más que canta odas al No Way Like the American Way, no hay nada que lo redima. Con algún par de situaciones cómicas, pero predecibles, y que no alcanzan a salvar a la cinta.