La guerra de los aranceles golpea a la industria del cine.
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció el domingo 4 de mayo, que ha instruido al Departamento de Comercio imponer un arancel del 100% a las películas producidas fuera del país e importadas a Estados Unidos, argumentando que la industria estadounidense estaba muriendo “muy rápidamente”, debido a los incentivos que otros países ofrecen a cineastas para realizar sus producciones en el extranjero.
En una publicación hecha por Trump en Truth Social, dijo:
“La industria cinematográfica estadounidense se está muriendo rápidamente. Otros países ofrecen todo tipo de incentivos para alejar a nuestros cineastas y estudios de Estados Unidos.
“Por lo tanto, autorizo al Departamento de Comercio y al Representante Comercial de EE.UU. a iniciar de inmediato el proceso de instaurar un arancel del 100 % a todas las películas que ingresen a nuestro país producidas en el extranjero.
"¡QUEREMOS PELÍCULAS HECHAS EN ESTADOS UNIDOS, OTRA VEZ!”
Trump añadió:
“Hollywood y muchas otras zonas de Estados Unidos están siendo devastadas Este es un esfuerzo conjunto de otras naciones y, por lo tanto, una amenaza para la seguridad nacional. Es, además de todo lo demás, ¡mensajería y propaganda!”
El secretario de Comercio, Howard Lutnick, declaró en X: "Estamos en ello."
No se dieron a conocer detalles de cómo los aranceles serán implementados, así como tampoco se dejó claro si estos aplicarían a todas las películas, incluyendo las exhibidas en cine y las que son películas de plataforma de streaming, ni qué papel tendrían los costos de producción o la recaudación de taquilla.
Las películas son propiedad intelectual, no bienes, por lo que representan un tipo de servicio que actualmente no está sujeto a aranceles. Sin embargo, el Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) señala que algunos servicios pueden estar sujetos a ciertas barreras comerciales no arancelarias, como regulaciones e incentivos fiscales. Estas podrían perjudicar a la producción cinematográfica estadounidense.
Importante tener en cuenta que la producción de películas y televisión ha estado ganando fuerza lejos de Hollywood al dirigirse a lugares con incentivos fiscales que hacen que el rodaje sea más barato.
Muchas ciudades extranjeras han ofrecido importantes exenciones fiscales a estudios de cine y televisión para rodar películas y series fuera de Hollywood. Esto ha provocado que un gran número de producciones trasladen sus operaciones a lugares como Toronto, Vancouver, y Dublín.
En respuesta, el gobernador de California, Gavin Newsom, ha propuesto un enorme crédito fiscal para que la producción vuelva a Hollywood.
La pandemia ha jugado un papel muy importante en el cambio en la industria.
Si bien es cierto que Hollywood está lejos de estar devastado, las entradas de cine han bajado en Estados Unidos debido a que el número de grandes películas en cartelera se ha desplomado desde la pandemia, y los consumidores han cambiado sus hábitos de consumo a plataformas de streaming para ver cine en casa. Esto sin contar que el costo de los boletos ha aumentado.
En cuanto a recaudación de taquilla: Estados Unidos alcanzó un máximo de poco menos de $12,000 millones de dólares en 2018, para desplomarse a poco más de $2,000 millones en 2020, frente al cierre masivo de cines en el país –y el mundo entero–. Los cines desde entonces se han recuperado, aunque la recaudación de taquilla nacional no ha superado los $9,000 millones de dólares. También es importante destacar que la cantidad de lanzamientos en cine es aproximadamente la mitad de lo que fue en 2019.
- Las plataformas de streaming pertenecen en gran medida a los grandes estudios de Hollywood, y han tardado años en generar ganancias.
Los aranceles de Trump
Trump ha impuesto un arancel universal del 10% a la mayoría de los bienes que entran en Estados Unidos y ha implementado, y luego postergado, aranceles "recíprocos" aún más sustanciales a docenas de otras naciones. También ha impuesto aranceles del 25% al acero, el aluminio, los automóviles, las autopartes y algunos productos de Canadá y México. Y ha impuesto un arancel masivo del 145% a las importaciones procedentes de China.
Pero ninguno de esos aranceles afecta a los servicios. Los aranceles a la producción cinematográfica, si llegan a aprobarse, podrían ser los primeros.
Este lunes hubo respuesta de algunos líderes mundiales, como el caso de Australia y Nueva Zelanda, quienes respondieron al anuncio arancelario de Trump afirmando que defenderían sus industrias locales (vía Reuters). Nueva Zelanda sirvió como escenario de la aclamada saga de The Lord of the Rings, mientras que Australia es uno de los lugares predilectos para rodar, de múltiples cineastas, como el caso de la franquicia Matrix, además de ser base permanente de Marvel Studios. También ha servido como locación de proyectos como The Fall Guy y Godzilla vs Kong.
Por otra parte, el sindicato británico de medios y entretenimiento Bectu instó al gobierno a actuar con rapidez para proteger la vital industria cinematográfica del país, diciendo por medio de su directora, Philippa Childs:
"Estos aranceles, tras la COVID-19 y la reciente desaceleración, podrían suponer un duro golpe para una industria que apenas se está recuperando.”
Añadió que también pondrían en peligro decenas de miles de empleos de profesionales independientes que realizan películas en el Reino Unido.
El pasado mes de enero, Trump nombró a los actores veteranos de Hollywood, Jon Voight, Sylvester Stallone y Mel Gibson “embajadores especiales” en Hollywood, para restaurar la “Época Dorada” de la industria.
