Hace dos años, escribí esta nota para el blog de cine de El Universal. Es lo primero que publiqué en medios electrónicos, y es por eso que decidí compartirla con la comunidad de cinecinecine. Pensé editarla, porque a la distancia ya la veo mal escrita y un poco ingenua, pero decidí que es mejor dejarla en su versión original para que quede como testimonio del camino andado. Gracias a todos los que amablemente me leen cada semana y me dejan comentarios, porque -como podrán comprobar- me han ayudado enormemente a expresarme mejor. ¡Felices vacaciones!
Obligado durante semana santa es ver diferentes visiones de la Pasión de Cristo y diversas películas de temas bíblicos. Género en muchas ocasiones malinterpretado, es en realidad una interesante muestra de diferentes visiones y estilos de abordar una historia que, de entrada todos conocemos. Y es que las películas con el tema de la Pasión siempre han sido superproducciones. Grandes directores, actores, guionistas y fotógrafos han plasmado su idea de la fe y el mundo religioso en la pantalla.No debe ser fácil asumir el reto de contar algo que todo mundo sabe en que acaba. Tampoco personificar a una persona de la cual se tiene una imagen estereotipada a través de siglos y siglos de iconografía religiosa. Es así como de las versiones más tradicionales hasta las más audaces son infaltables en la programación televisiva y cinematográfica de estas fechas. Resaltan por la nostalgia: Rey de Reyes, Ben Hur, Barrabás y el Mártir del Calvario donde vemos a un Jesús con un sospechoso acento español. El Mártir del Calvario gozaba de aval religioso al inicio de la proyección.
Por lo audaz: Jesús de Montreal, La última tentación de Cristo , Nazarín.
Por lo cursi: Jesucristo Superestrella
Y por sangrienta: La Pasión de Mel Gibson, que además tiene la enorme virtud de estar hablada en arameo y de exponer a un demonio andrógino que resulta visualmente muy recomendable.
Para todos los gustos y discusiones, la semana santa y la pasión de Cristo siempre han sido tema popular y recurrente en la pantalla grande