"Y eso tiene sus consecuencias. Estamos compitiendo con un monstruo que está muy consolidado, a través de la televisión, del start system, a través de producción, mercancías y productos culturales y no culturales los cuales avasallan y dominan el mercado", indicó. Roque mencionó que, en ese sentido, "el Estado está haciendo, por lo menos desde el instituto, un trabajo en redes sociales, formación de públicos desde la infancia y la adolescencia, en las escuelas.
"El instituto está abriendo frentes para desde distintos ángulos atacar este problema con el objetivo puesto en el mediano y largo plazo", explicó. La destacada documentalista mexicana, nacida en Argentina, dijo que las dificultades afectan en particular al cine nuevo y experimental. "En especial, las películas que no tienen grandísimos presupuestos para promoción y poder competir con las producciones estadounidenses, ya que las distribuidoras independientes no pueden lanzar sus películas en las mejores condiciones", dijo.
Roque destacó en ese sentido la labor del Imcine para promover en los circuitos culturales, en los festivales, como el de Lebu, el cine que se está haciendo hoy en México, que "probablemente sea el más diverso que ha habido en la historia del cine mexicano. Hay de todo en contenido, de todo en formas, de todo en perspectiva y alcance. Hay empuje y una altísima producción de cine documental. Hablamos de cine y no sólo de 35 milímetros, y si bien esa es una aspiración y un deseo, no necesariamente es una condición", concluyó.