El cine suele permear todos los aspectos de la vida, e incluso reflejarse en ella, de modo que hay algunos géneros y estilos típicos para determinadas temporadas. Cuando se acerca la Semana Santa, tanto las programaciones de las televisoras, e incluso algunas salas, se convierten en campo para un género muy particular: El peplum, que se ha vuelto inseparable de la temporada.
También llamado género de Espada y Sandalía, es una forma cinematográfica que se sitúa ya sea en el periodo greco-romano, o en ambientes fantástcos que tengan esas mismas características. Dado que depende de un ambiente histórico, puede tener una gran cantidad de vertientes, desde el romance hasta la acción, aunque esta última es la más frecuente, usualmente con elementos del cine épico.
Aunque hay algunas cintas que tenían elementos del mismo desde el cine mudo, el primero que tenía la características que lo definieron como tal fue Cabiria, de 1914. Esta cinta italiana abrió las puertas del cine de este país, que literalmente inundaría las salas europeas durante los 10s y los veintes.
Aunque, como dijimos, el peplum puede tener una gran cantidad de vertientes, pero básicamente oscila entre las cintas de acción, y las de corte religioso. Entre este género encontramos cintas tan disímbolas como 300, Cleopatra, El Mártir del Calvario, Furia de Titanes o Espartaco, por sólo mencionar las más conocidas.
fda