El final de Harry Potter: Harry Potter y las Reliquias de la Muerte

| |

harry-potter-y-las-reliquias-de-la-muerte-1.jpg

ADVERTENCIA: Si no has leído el séptimo libro de Harry Potter, Harry Potter y las Reliquias de la muerte (Harry Potter and the Deathly Hallows), te sugiero que no sigas leyendo este artículo ya que se mencionarán pasajes relevantes de la trama que podrían arruinar tu lectura.

El final tan esperado de la saga de Harry Potter ha llegado para todos los fans del mago más famoso del mundo. El final de las aventuras de Harry fue recibido con una mezcla de alegría, grandes expectativas y tristeza debido a que nunca más esperaremos con ansiedad un nuevo libro, los siete han sido escritos y para cuando se lea la última página todo habrá sido dicho y ya no quedará nada más a la imaginación.

Al final de Harry Potter y el Misterio del Príncipe, todos quedamos sorprendidos ante la trágica muerte de Albus Dumbledore a manos del controversial Serverus Snape. Ahora Harry debía enfrentar solo su destino y asegurarse de destruir a Lord Voldemort aunque en ello le fuera la vida.

Los dos años posteriores al lanzamiento del sexto libro estuvieron llenos de expectativa, teorías y especulaciones que mantuvieron a los fans más que ocupados. Había muchas cosas por resolver: cuál sería el destino de Harry, sobreviviría o daría su vida por salvar al mundo de la magia; el “asesinato” de Dumbledore fue un acto de cobardía absoluta o el sacrificio de un mago por el bienestar del mundo; Severus Snape amigo o enemigo; y por supuesto el sin fin de suposiciones de cómo se armarían al final las parejas románticas.

El 21 de julio de 2007, día del lanzamiento en inglés de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte rompió récords de ventas y miles de fans alrededor del mundo descubrieron en un par y a veces en una sola noche el destino final de Harry sus amigos.

Para los lectores de habla hispana la espera fue mayor y tuvieron que esperar hasta el 21 de febrero de este año para conocer el desenlace, sin embargo, la espera valió la pena.

harry-potter-y-las-reliquias-de-la-muerte-2.jpg

El desarrollo de la trama es bastante interesante y nos lleva a  momentos de verdadero suspenso. Harry debe encontrar los horcruxes restantes para destruirlos y la labor es difícil, Lord Voldermort está en ascenso y su poder cada vez más extendido hace que Harry tenga que cuidarse hasta de su propia sombra.

Precisamente ese aspecto de no saber que le esperaba a Harry cada capítulo es lo que hace que este libro no se pueda soltar hasta terminarlo. En los fans de hueso colorado generó un acelere de corazón y una ansiedad grande por saber si Harry lograría su cometido y sobre todo si salvaría la vida.

En general el desarrollo de los personajes también fue muy bueno. Por fin pudimos ver a un Harry maduro, consiente de la misión que está en sus manos; quedó atrás el “chavito”, por así llamarlo, que vivía bajo la protección de Dumbledore, que no se comprometía y que cuando podía no le importaba utilizar recursos poco confiables para hacer más fácil su labor escolar; Hermione demostró ser una mujer muy fuerte y sobre todo capaz de dar todo su apoyo a Harry, valiente, decidida y tenaz dio a Harry la fortaleza necesaria para seguir adelante cuando el camino parecía imposible; Ron, en un principio no es más que el Weasley berrinchudo y celoso de siempre, llegando incluso al punto de abandonar a sus amigos en un arranque de mal genio, sin embargo la autora lo rescata y tras una reflexión regresa al lado de Harry y Hermione demostrando ser un tan digno héroe como sus contrapartes.

Dentro de este desarrollo de personajes creo que el que más nos sorprendió de manera muy grata fue el desarrollo que la autora dio a Neville Longbottom. Ese muchachito rechoncho y tímido que temblaba de terror ante Snape, se convirtió en este libro en un joven mago decidido y prácticamente temerario que enfrentaba sin miedo alguno a los nuevos y crueles profesores de Hogwarts para defender a los más vulnerables, su valentía lo llevo a sufrir varios abusos físicos y eso no mermó su coraje por el contrario lo incrementó; siendo él quien dirigiera la nueva rebelión de alumnos dentro del colegio, dando fuerza y ánimo para tolerar la injusta situación académica.

Como recordarás Neville era el otro niño que Voldemort pudo haber escogido de acuerdo a la profecía de Trelawney y sin lugar a dudas demostró en este libro que habría sido digno oponente. Al parecer era sólo necesario tocar las fibras necesarias para liberar a ese mago valiente y fuerte que Neville siempre había sido y que durante tantos años había vivido en las sombras.

Contrario a este buen desarrollo de personajes, creo que la autora se quedó corta con el desarrollo de Viktor Krum mostrándolo sólo como un joven arrogante y cretino que asiste a la boda de Fleur y Bill como mero trámite. Quienes recuerdan al enigmático jugador de Quidditch del cuarto libro me darán la razón al opinar que merecía una mejor aparición en el libro final e incluso a mí me habría gustado que hubiera tenido una participación más activa en la lucha contra Voldemort y que contra todo pronóstico fuera él quien al final ganara el corazón de Hermione.

La trama se va haciendo más intensa conforme vamos avanzando en la lectura, hasta llegar a la batalla final en el Castillo de Hogwarts. La narración de esta batalla es muy intensa y genera un gran interés e incluso ansiedad en el lector que no puede esperar a saber que va a ocurrir después. Por supuesto esta intensidad culmina con Harry venciendo a Voldemort y restaurando la paz y el orden al mundo de la magia. A pesar de que el final no fue sorpresa para la mayoría, la intensidad y el suspenso de la narración valieron mucho la pena.

harry-potter-and-the-deathly-hallows.png

Comentemos ahora algunos aspectos relevantes del libro. A lo largo de la lectura se van revelando varios misterios que durante años generaron un sin fin de interrogantes. Sin embargo, creo que el más relevante es el amor pasional, incondicional y hasta un poco obsesivo de Severus Snape por Lily Evans. Muchos sospecharon durante mucho tiempo que Snape amaba a la mamá Harry y este libro confirmó sus sospechas en todos los sentidos. Esta chispa de romance y ternura le dio un sabor especial al libro. Pudimos conocer un lado de Snape que jamás habríamos sospechado. Severus Snape había sido capaz de amar con toda ternura posible y desde su infancia a Lily Evans, entre ellos hubo una fuerte amistad (algunos fans dicen que el libro deja ver veladamente que quizá hubo algo más que una amistad). Lamentablemente Snape se deja guiar por malas compañías y en un instante no sólo pierde la amistad de Lily sino toda posibilidad de ser feliz con ella. Aún así la amargura que acompañó a Snape hasta el fin de sus días no le impidió seguir amando a Lily, arriesgando todo, incluyendo su vida para proteger al hijo de ésta.

A su vez conocemos más acerca de la vida de este misterioso profesor que tanta polémica y gusto generó entre los fans. Y finalmente entendemos que todo el tiempo fue el brazo derecho de Dumbledore en la lucha contra Voldemort. Incluso queda eximido del asesinato de Dumbledore al sernos revelado que esa muerte era necesaria para salvar el alma de Malfoy y librar al director de Hogwarts de una muerte mucho menos digna y más dolorosa (recuerda que la maldición del anillo de Gaunt había atacado cruelmente a Dumbledore y poco a poco estaba invadiendo su cuerpo matándolo lentamente).

Estas revelaciones nos hicieron ver que Severus Snape sólo era humano y que los errores de su juventud lo persiguieron hasta su muerte. A muchos fans nos resultó muy triste el trágico final de Snape, sin embargo, para un hombre como él, no había otra salida; desde mi punto de vista su vida estaba demasiado destruida como para poder reconstruirla en un mundo sin Voldemort. El final de Snape si bien arrancó las lágrimas de muchos fans fue muy digno, murió como un héroe, como el espía perfecto sin que se descubriera su doble identidad y mirando a los ojos de la mujer que amaba.

Algunos otros aspectos relevantes en la lectura fue conocer el origen de los horcruxes restantes; conocer más acerca de la juventud y errores de Albus Dumbledore, personaje al que pensamos infalible e intachable; y conocer que son las Reliquias de la Muerte (la Varita de Saúco, la Piedra de Inmortalidad y la Capa de Invisibilidad), porque se les llama así, su importancia en el mundo de la magia, su relevancia en la trama y saber que Harry está directamente relacionado con Ignotus Peverell dueño de la Capa de Invisibilidad, una de las Reliquias de la Muerte.

Todos estos ingredientes se fueron combinando para llevarnos a un desenlace muy interesante donde vimos a un Harry sagaz, valiente que ya no teme a Voldemort y que con soltura logra acabar con la mayor amenaza del mundo de la magia.

Pasemos ahora a revisar el resto de las muertes que ocurren en las Reliquias de la Muerte:

Charity Burbage: antigua profesora de Estudios Muggles en Hogwarts, muere en el primer capítulo a manos de Voldemort, no si antes rogar por su vida y suplicarle a Snape que la ayude. Este homicidio estremeció a los fans y abrió la puerta para continuar con las especulaciones acerca de si Snape está completamente del lado de Voldemort o si sigue en su papel de espía para la Orden del Fénix. Cuando conocemos la verdadera alianza de Snape comprendemos que debe haber sido extraordinariamente difícil para él permitir y presenciar el homicidio de una colega.

Hedwig: la adorable lechuza de Harry, muere casi al principio del libro y en mi opinión y la de muchos fans fue una muerte innecesaria. Según la autora fue la manera de demostrar que la infancia de Harry había llegado a su fin, a partir de ese momento la inocencia había dejado de existir para enfrentarse a un mundo cruel y destructivo. Si bien su justificación suena lógica, yo pienso que la pobre lechuza no tenía la culpa, todos sabíamos que Harry se enfrentaba al mayor reto de su vida y que tendría que convertirse en adulto antes de tiempo, entonces ¿cuál era la necesidad de matar a una hermosa lechuza blanca? Yo creo que sólo fue un arrebato de agregar drama a la trama.

Alastor Moody: el antiguo auror y algo loco mago, sacrifica su vida para asegurar el traslado seguro de Harry de casa de los Dursley a su nuevo hogar. Es un final triste para un auror de tanto renombre pero no inesperado, Alastor murió en combate y eso seguramente en el más allá lo hizo sentirse muy orgulloso.

Peter Pettigrew: una muerte ansiada por los fans. El traidor que entrega a los Potter tenía que morir, además recordemos que de acuerdo a Dumbledore, Pettigrew estaba en deuda con Harry, por lo tanto era lógico que esa deuda se pagara en el séptimo libro. Sin embargo, la muerte de Pettigrew causada por su mano de plata, decepcionó a muchos fans, ya que fue demasiado escueta. Nos habría gustado verlo sufrir a manos de Voldemort o de algún Mortífago y es más nos habría encantado ver a un Pettigrew negándose a darle tortura o muerte a Harry y que eso desencadenara en su muerte.

Dobby: el tierno y sumiso elfo doméstico no logra sobrevivir para ver un mundo sin Voldemort donde seguramente los derechos de los elfos serían respetados y se les trataría con más dignidad. Otra muerte que arrancó lágrimas de los fans. En un principio me pareció exagerada e innecesaria la muerte de Dobby, sin embargo, viéndolo desapasionadamente Dobby no pudo haber pedido mejor final para su vida, murió libre y dio su vida por su héroe Harry Potter.

Vincent Crabbe: creo que pocos resintieron la muerte de este ignominioso personaje, es más estoy segura que causó satisfacción entre muchos fans que Malfoy se quedará sin uno de sus fieles lamebotas. Además que la muerte del personaje se produce por su propia estupidez.

Ted Tonks: padre de Nymphadora, mago de origen muggle que lamentablemente se convierte en una víctima más de la encarnizada persecución que sufren los magos de este origen durante la guerra. A pesar de que no conocimos mucho de este personaje fue una pena saber que murió de manera tan injusta

Fred Weasley: la tragedia toca la puerta de la familia Weasley cuando uno de los gemelos, Fred, muere durante la batalla de Hogwarts. Para mí fue una muerte innecesaria y que no encajó del todo en la trama. Desde mi punto de vista fue otra muerte que se agregó para darle un toque más trágico al libro.

.Nymphadora Tonks y Remus Lupin: los amantes más trágicos de la saga después de James y Lily Potter. Tonks y Lupin logran reunirse como pareja al final del Misterio del Príncipe y contra viento y marea inician su vida de casados en medio de una sangrienta guerra e incluso se convierten en padres de un lindo bebé al que llaman Ted. Romance digno de cualquier tragedia griega y como tal, los amantes terminan muertos en medio de la Batalla de Hogwarts dejando huérfano a su único hijo. Nuevamente opino que ambas muertes fueron innecesarias y sólo se escribieron para agregar drama y tragedia al libro. Lupin fue un personaje rodeado de tristeza a lo largo de toda su vida y creo que merecía un mejor final que morir a manos de un Mortífago; creo que merecía vivir feliz y pleno con su esposa y formar una familia con muchos hijos y volverse loco de alegría viviendo experiencias a las que difícilmente podría haber tenido acceso en un mundo con Voldemort vivo. Por su lado Tonks merecía ser feliz más tiempo al lado de su lobo que tanto trabajo le costó conquistar. Pero bueno, sólo la autora tenía poder sobre sus personajes y para decepción de muchos fans estos dos tortolitos no sobrevivieron la guerra.

Colin Creevey: el tierno y joven admirador de Harry. Siendo mago de origen muggle no se salvó de ser perseguido por el Ministerio de Magia, sin embargo, demostró su valor al participar en la cruenta Batalla de Hogwarts donde pierde la vida. En mi opinión otra muerte más sin sentido. El pobre niño muere sin pena ni gloria en medio de una batalla donde no le correspondía estar. La autora justificó esta muerte diciendo que Colin fue a Hogwarts consiente de su corta edad y del peligro que corría; aún así creo que no debió matarlo sino darle una segunda oportunidad en el mundo de la magia donde bien pudo haber sobrevivido siendo el biógrafo oficial de Harry.

Bellatrix Lestrage: la cruel y devota Mortífaga que junto con su marido y otros de sus secuaces torturaron hasta la locura a los padres de Neville Longbottom, desde el momento en que sus crímenes son dados a conocer este personaje fue uno de los más odiados entre los fans de la saga. Conforme fuimos conociéndola mejor más desagradable nos resultaba con su clara locura y descarado cinismo. Muchos fans apostábamos a que Bellatrix encontraría su fin a manos de Neville, sin embargo, fuimos sorprendidos al leer que esta horrible mujer muere a manos de la dulce Molly Weasley que en un arranque de rabia y con el valor que sólo una madre puede tener al defender a sus hijos termina con la vida de la infame Mortífaga y además inmortalizó una frase que resonará por muchos años entre los fans de Potter: ¡A mi hija no, perra! (traducción literal del inglés). Bellatrix misma no puede creer que su vida y su poder terminaran a manos de una traidora de sangre como la Sra. Weasley; un final fantástico para uno de los personajes más crueles.

Lord Voldemort: ¡Ah! La muerte más celebrada en los 7 libros de Harry Potter. La muerte de Lord Voldemort o Tom Riddle significó el final feliz tan esperado por miles de fans alrededor del mundo. Además Voldemort muere como merece humillado y en contacto con su tan rechazada humanidad. A pesar de haber dividido su alma 7 veces para asegurar su inmortalidad, Voldemort al final se enfrenta a lo inevitable, a la muerte, al dolor y al pago de sus múltiples crímenes a manos del único ser que intentó destruir pero no pudo y claro está enfrentándose una vez más al poder del Amor, ese sentimiento tan despreciado por el maléfico mago, pero que finalmente significó su perdición. Lo único que quedó de él fue un ser grotesco, débil y pusilánime que vive en un limbo del que no podrá escapar jamás. Desde mi punto de vista, excelente final para el Señor Oscuro.

Y así después de 36 capítulos y casi ochocientas páginas el libro siete llega a su fin, Voldemort está muerto y el mundo de la magia puede empieza una nueva vida sin la amenaza constante de un Señor Oscuro acechándolo.

El epilogo que viene al final de Harry Potter y las Reliquias de la Muerte nos relata que ocurrió con algunos de los personajes y se sitúa 19 años después en King’s Cross cuando Harry y sus inseparables amigos Ron y Hermione se encuentran en la estación dejando a sus hijos en el tren rumbo a Hogwarts. Para muchos fans, incluyéndome, fue un epilogo demasiado escueto.

Por supuesto Harry se casa con Ginny Weasley y Ron se casa con Hermione; parejas que se vislumbraban desde tempranas etapas de la saga. Nos enteramos de los nombres de los hijos de cada matrimonio. En el caso de Harry y Ginny nombran a sus hijos de manera muy peculiar: James Sirius, Albus Severus (que cualquier fan estará de acuerdo conmigo que esto es exagerado) y Lily Luna (lo cual es todavía más exagerado y cursi); Harry no lo sabe pero en cuanto sus hijos cumplan la mayoría de edad lo van a demandar y se van a cambiar los nombres. Y en el caso de Ron y Hermione nombran a sus hijos de manera más normal y sana: Rose y Hugo. Sabemos también que Draco Malfoy está casado y tiene un hijo llamado Scorpius (Harry no va a ser único demandado).

Nos enteramos brevemente que Neville ahora es profesor en Hogwarts, seguramente de Herbología.

Y no hay más novedades con respecto a otros personajes.

Los niños se suben al tren rumbo a un nuevo año en Hogwarts y fin de la historia.

Para muchos fans esto fue una completa decepción. Esperábamos más información con respecto al destino de otros personajes. Saber a detalle que fue del resto de los Weasley, que fue de los demás compañeros de Harry tanto los de Gryffindor como los de las demás casas, que fue de Luna Lovegood, como se restituyo el nombre de Snape e inclusive saber como fue que los Malfoy lograron salvarse una vez más de ser juzgados como Mortífagos.

Sin embargo, la autora nos deja con un epilogo demasiado vago y abierto a que cada fan se imagine como mejor guste el destino de los personajes que sobrevivieron al final.

Harry Potter y las Reliquias de la Muerte dejo varios sentimientos en los fans, hubo satisfacción por haber tenido un libro interesante y lleno de suspenso con un final feliz y claro está como lo he expresado algunas inconformidades por no haber obtenido las fantasías anheladas por tantos años.

Sin embargo, este último libro constituyo un digno final a una saga de 7 tomos que ahora ya forma parte de un importante legado en el mundo de la literatura.

En la escala del 1 – 10 yo le doy un bonito 9 a Harry Potter y las Reliquias de la Muerte

Ante la situación de haber dejado algunos cabos sueltos, desde al lanzamiento del libro la autora ha ido revelando diversos aspectos con respecto a que ocurrió con los personajes sobrevivientes. Nos enteramos que Bill y Fleur tienen tres hijos (Victoire, Dominique y Louis), que Charlie es un soltero empedernido, que Percy se casa con una chica llamada Audrey (que nunca antes fue mencionada en los libros) y tienen dos hijas (Molly y Lucy), George se casa con Angelina Johnson y tienen dos hijos (Fred y Roxanne). Nos enteramos también del nombre de la esposa de Malfoy: Asteria Greengrass con lo cual entendemos porque se atrevieron a llamar a su hijo Scorpius. También tuvimos información de que Luna Lovegood después de viajar se casó con un tal Rolf y tuvo dos hijos (Lorcan y Lysander) aquí no se cuestiona lo raro de los nombres debido a la siempre particular actitud de Luna.

Y lo que sin duda fue la revelación que más escándalo y polémica levantó posterior al lanzamiento del libro, fue saber que Albus Dumbledore era gay. Desde mi punto de vista una revelación innecesaria que sólo generó ámpula entre los fans de Harry y del propio director.

Afortunadamente para todos los seguidores de Potter y sus amigos existe el muy conocido fandom, donde a través de universos alternos se pueden dar a conocer nuevas historias, finales alternativos y dar a cada personaje el destino que como fan mejor nos parezca.