Considerando que estos días se prestan para hablar de temas algo aterradores, creo que es un buen momento para recordar un género que, en su momento, ocasionó escándalos. El giallo es el nombre de una serie de películas de corte sobrenatural, especialmente sangrientas, creadas en Italia en la década de los sesentas y setentas. En aquel tiempo, el cine gore comenzaba a hacer sus tímidas apariciones en las salas de Estados Unidos, por lo que los italianos decidieron llevar el concepto un paso más allá. Directores como Dario Argento y Mario Bava fueron las puntas de lanza del movimiento, que aunque estuvo prohibido en varios países, se convirtió en un material sumamente buscado. Como dato curioso, hemos de mencionar que, dado que se dio en forma casi simultanea a las sexi-comedias italianas, y el cine erótico francés, los críticos norteamericanos llamaron a los setentas como la degeneración europea.