El maquillaje es una de las partes más importantes del cine, pues su utilidad cubre una gama enorme de posibilidades. Si bien no nació con esta forma artística, pues muchas de sus expresiones vienen desde los tiempos del teatro, no cabe duda de que la cámara lo impulsó de manera notable, pues la necesidad de acercamientos y tomas a detalle obligaba a que el trabajo fuese más meticuloso. A continuación, veremos un poco los principales tipos de maquillaje que existen.
- Maquillaje base: Prácticamente toda persona que vaya a aparecer frente a una cámara requiere de este paso. Se trata simplemente de una base mate que evita que la piel brille, y hace más sencillo el uso de luces y ángulos de cámara. Hasta las producciones más básicas requieren de este tipo de aplicación.
- Maquillaje estético: Sombras, labiales, blush y toda la gama cosmética que utuliza cualquier mujer es también necesaria para la cinematografía. Obviamente, ésta tiene que adecuarse al personaje que esté encarnando la actriz, las circunstancias y incluso la época en que se desarrolla.
- Maquillaje escénico: Su nombre viene directamente de la técnica teatral, y permite caracterizar a los actores a un nivel básico. Heridas superficiales, expresiones de agotamiento, desnutrición o ciertas enfermedades pueden ser simuladas con un poco de color bien aplicado, y algunas aplicaciones básicas. Muchas de las primeras criaturas del cine se creaban de esta forma.
- Maquillaje prostético: La línea que divide a éste del escénico es a veces muy tenue, pues este segundo requiere de piezas de latex, agregados y extensiones de más complicación. En general, se considera que si la capa que se agrega mide más un milímetro de grueso, se considera ya prostético.
Estas son las formas más usuales, pues en general cualquier otra es una variación de estas cuatro.