El peleador. Un héroe en la familia.

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The Fighter

El peleador. The Fighter. USA 2010

  • Dir. David O. Rusell
  • Reparto: Christian Bale, Mark Wahlberg, Amy Adams.

Calificación 5/5 estrellas

Hay una razón importante para explicar porqué las películas sobre boxeadores funcionan tan bien en taquilla y tienen tanta aceptación del público. El box es un deporte solitario, individual,  que generalmente recluta chicos de barriadas pobres, que no tienen nada que perder al ganarse la vida a golpes. Es la metáfora perfecta de superación, de labrarse un camino con la fuerza de los puños, apretando los dientes, partiéndose el alma. Y si  además -como en este caso-  cuentan con una historia verídica, buenas actuaciones y un guión armado a la perfección,  además tienes - con todo derecho- una  fuerte candidata para ganar el Oscar.

La trama nos cuenta la historia de Dicky Eklund (Christian Bale), el orgullo de su ciudad y su familia, que una vez peleó contra Sugar Ray Leonard. La leyenda cuenta que lo noqueó, aunque hay opiniones divididas.

Al correr del tiempo,  Micky Ward (Mark Wahlberg) su hermano menor,  se ha convertido en el prometedor luchador de la familia, cuya carrera está en manos de su madre Alice (Melissa Leo). Sin embargo, siempre acaba perdiendo y cada vez mas frustrado. Cuando el combate más reciente Micky casi fallece, es persuadido por su nueva novia, Charlene (Amy Adams), para que se separe de su familia, persiga sus propios intereses y entrene lejos de su problemático hermano. Para entonces, los problemas familiares han hecho crisis dentro y fuera del ring: Dicky termina en la cárcel después de una largo historial de violencia y consumo de drogas; la familia se cimbra. Pero Micky ha tomado una decisión y está decidido a salvarse de ser el receptáculo de la crisis familiar.

Son varios los temas que la película aborda con honestidad, y no todos son originales, de hecho. La historia del chico común que quiere poner en alto el nombre de su pueblo, el amor que te da fuerzas para remontar la adversidad, la decadencia de una estrella a causa de las drogas, la mafia que se esconde detrás del boxeo, etcetera.

Sin embargo, la película consigue no ser predecible y esperar el final con verdadera curiosidad. Un excelente ritmo en la narración que nos hace reconocer los clichés propios del género pero nos da la sensación de que todo podría terminar diferente.

Un tipo de cine sencillo y sin pretensiones que sin embargo tiene un mensaje poderoso, mueve fibras sensibles y te deja con la sensación de que contar historias de la gente común y corriente,  sigue siendo la mejor manera de hacer cine. Ojala la academia también lo considere así.

Lo mejor:

  • Christian Bale no es el protagonista central, pero sin duda es la actuación más sobresaliente de la película. Muy lejos del galán hollywoodense que se aleja de los papeles que puedan no favorecerle, hace derroche de  su capacidad camaleónica, lo cual agradecemos bastante.
  • Amy Adams, por su parte, no se queda atrás. Un papel diferente a lo que le hemos visto, un destacado soporte que replica líneas y diálogos de manera brillante.
  • La peleas. Emocionantes y llenas de adrenalina. ¡Hay aplausos en el cine!
  • Un soundtrack ochentero muy recomendable.

Lo peor:

  • Walhberg no arriesga. A fuerza de repetirlo, el papel del muchacho común que logra grandes hazañas le sale bastante bien, pero no vemos nada nuevo.
  • Los clichés existen y no se esconden. Hay que entrenar al estilo Rocky en la calle del pueblo...