El 23 de agosto de 1973, el asaltante solitario Jan-Erik "Janne" Olsson intentó asaltar el Kreditbanken de Estocolmo, Suecia. El golpe fue un fracaso, por lo que tuvo que tomar cuatro rehenes, que estuvieron con él durante seis días. Al ser liberados, los prisioneros mostraron una abierta simpatía por el criminal, negándose a declarar, e incluso reuniendo dinero para pagar su defensa. A partir de ese momento, el fenómeno en que las víctimas de secuestro acaban desarrojando un vínculo con sus captores es llamado Síndrome de Estocolmo.
Si bien el fenómeno es muy interesante desde el punto de vista psiquiátrico, este no es el tema de este texto. En esta ocasión, hemos seleccionado cinco cintas diferentes, en donde este fenómeno se ve en diferentes formas y niveles, algunos de ellos extraordinarios. Te invitamos a que los analices.
La Bella y la Bestia
A diferencia del cuento original, Bella no sintió pena o lástima por la Bestia al principio, y el ser no trataba de ganársela. Ella realmente estaba asustada, y él era brutal en su trato. Fue tras de este trato de cautivo que los dos comenzaron a acercarse, y los sentimientos cambiaron.
12 Monkeys
En un principio, el interés de Kathryn por James era puramente profesional. Es hasta después de que él la secuestra que realmente se forma un vínculo más fuerte. De hecho, en varias ocasiones tiene la posibilidad de escapar, pero no lo hace para darle todo el apoyo que puede.
King Kong
Si bien en todas las versiones se dio en uno u otro grado, en la realizada por Peter Jackson es donde ese vínculo se vuelve mucho más fuerte y notorio, al grado de que Ann intenta activamente salvar la vida del gorila, acercándose a él de forma totalmente voluntaria.
¡Àtame!
En esta cinta vemos los inicios del actor Antonio Banderas, quien interpreta a un enfermo mental que secuestra a una actriz porno con la idea de casarse con ella. Aunque al principio ella está aterrada, al final el amor acaba surgiendo entre ambos.
Dog Day Afternoon
Dos ladrones inexpertos quedan atrapados dentro de un banco con un grupo de rehenes, convirtiéndose en un fenómenos mediático, desarrollándose una curiosa relación al interior del lugar. En ella vimos a un joven, pero excelente Al Pacino.