Google dedica su Doodle a la actriz e inventora Hedy Lamarr

Hedy Lamarr fue una de las actrices más bellas y talentosas del Siglo de Oro de Hollywood, pero era mucho más que eso. También fue una inventora consumada y científica que se acredita con varias nuevas tecnologías, algunas de las cuales todavía se utilizan hoy en día. Todo esto se muestra es un corto de animación que has probablemente ya visto si lo necesitas para realizar una búsqueda en la web en todo el día. Si por alguna razón usted no se echa un vistazo, hazte un favor y hacerlo ahora. Si es así, hazte un favor y mirar de nuevo.

Cortesía de la gente siempre creativas detrás de Google Doodles, el clip corto reúne un hermoso resumen de una mujer cuyos talentos eran increíblemente diversos. Nacida como Hedwig Eva Maria Kiesler en 1914, hace 101 años en la actualidad, la carrera cinematográfica de Lamarr comenzó en Alemania antes de mudarse a los Estados Unidos a finales de 1930. Trabajó contrario algunos de los actores de la parte superior del día, desde Clark Gable a Spencer Tracy a Bob Hope, a pesar de que tradicionalmente fue seleccionada en los roles que se centraron más en su belleza luego su diálogo. El vídeo es un ejemplo de esto mostrando ella en poses muy similares a punto de besar a su hombre principal, sólo los cambios de vestuario, porque las propias películas eran a menudo intercambiables. El último equipo es una referencia a lo que puede ser su papel más famoso, Dalila en 1949 de Sansón y Dalila.

No es mucho más que Lamarr, sin embargo, que sólo su trabajo en la pantalla. Este video muestra su aspecto aburrido en todo el glamour de Hollywood al ser excitado por la química, lo que probablemente no es demasiado lejos de la verdad. Lamarr era en realidad una persona muy creativa que siempre estaba buscando la manera de cambiar o mejorar las cosas. La actriz inventó una tableta que convirtió el agua en una bebida carbonatada (aunque no al parecer uno nadie estaría interesado en beber), y ella también hizo mejoras en la luz de parada automática, y el vídeo de Google incluye estas dos creaciones.

Su mayor contribución al mundo, sin embargo, era su invención, con su colaborador George Antheil, de salto de frecuencia de ondas de radio. Aunque diseñado originalmente como una manera de prevenir los torpedos de radio control se atasque por el enemigo, la tecnología ha pasado a ser utilizado en la mayoría de nuestros dispositivos de comunicación modernos de teléfonos inalámbricos a Wi-Fi. Hedy Lamarr cambió el mundo. Realmente no hay otra manera de decirlo.

Google hace un trabajo fantástico de resumir todo esto en apenas un minuto, sin una sola palabra. Es un homenaje fantástico que muestra todos los lados de una mujer que era infinitamente más compleja que sus papeles de la película permiten que ella aparece. Lamarr fue una gran inspiración para muchos de los actuales damas más importantes de Hollywood. Por su trabajo, tanto en pantalla como fuera, ella nunca será olvidado.

En 1937 Hedwig escapó al fin de Mandl. Ya en París, consiguió viajar más tranquilamente a Londres (Reino Unido). Allí conoció a Louis B. Mayer, el empresario de la Metro Goldwyn Mayer (M-G-M). Vendió sus joyas y huyó a los Estados Unidos, en el mismo barco en que él regresaba, para convencerlo de que la contratara como actriz. Al llegar a tierra, ya tenía un contrato de siete años y un nuevo nombre: Hedy Lamarr.

Así renació, pues volvió de nuevo a su vida como actriz. Había hecho hasta entonces, además de la película checoslovaco Éxtasis, cuatro películas alemanas, además de la citada: Dinero en la calle (1930), La mujer de Lindenau (1931), Las aventuras del señor O. F. (1931), y No necesitamos dinero (1932).