Grandes escándalos del cine : Foolish Wives

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Universal Studios
Universal Studios

Cuando el director Erich von Stroheim llegó a Estados Unidos procedente de Alemania, traía aún consigo mucha de la escuela del expresionismo de este país, que consideraba que el cine debía de ser una forma de expresión que no se sujetara a los caprichos de un estudio, sino donde el director pudiera expresarse libremente. Si bien esa escuela chocaba bastante con el estilo americano, Universal Pictures le dio ciertas libertades, pues era indudable que le daba resultados, aunque era común que se cortaran varias escenas antes de que le permitieran llegar a las pantallas.
Pero en 1922, decidió presionar un poco más, lanzando Foolish Wives, una historia en donde un vividor se hacía pasar por un noble alemán en Monte Carlo, cuyo modo de vida era seducir damas estadounidenses para quedarse con su dinero. Los motivos por los que el estudio puso el grito en el cielo fueron más de uno: Apasionado del realismo, usaba champaña real en casi todas sus escenas, lo cual era inusual en los tiempos de la Prohibición. Por otro lado, en varias escenas se valió del sexo explícito, que si era ya motivo de escándalo en los setentas, con mayor razón en los veintes.
Pero curiosamente, lo que realmente encendió los ánimos fue el que representara a todas las mujeres americanas como frívolas, lujuriosas y muy fáciles de engañar. Muchos consideraron que era un insulto directo a ese país, y se llegó a exigir que fuera expulsado. Universal fue lo suficientemente paciente como para dejarlo terminar, a pesar de que se convirtió en la primera película en alcanzar el costo de un millón de dólares, algo que en esos años era una enorme fortuna.
A pesar de ese costo, y que la edición de escenas la convirtió de 6 a 3 horas, se convirtió en un éxito en taquillas. Mucha gente acudía a las salas precisamente por el morbo, pues los rumores de la cinta corrieron con una rapidez asombrosa.
Actualmente, sólo se conserva la versión de 3 horas, pues el original sin cortes fue oculto por el mismo Stroheim, y nunca se dio con él. Esta cinta fue la primera prueba de que el escándalo vende, algo que se convertiría en regla en los siguientes años.