Gritos de muerte y libertad. Clases de historia por televisión

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El festejo del Bicentenario ha provocado la producción de expresiones de todo tipo. Cine, muestras museográficas, conciertos de cámara, puestas teatrales, etcétera.  La televisión no podria sustraerse de esta ola patriotica, y es así que Televisa presenta una serie de 13 capítulos que dan cuenta de los momentos más importantes del movimiento indpendiente en su primera temporada, que actualmente se transmite por canal 2.

El periodo de 1808 a 1821 es el que nutre esta primera entrega, que fue asesorada por Héctor Aguilar Camín, Javier Garcia Diego, Enrique Florescano y Rafael Rojas. La serie esta dirigida por Mafer Suárez y Gerardo Tort. El elenco está encabezado por Alejandro Tommasi, Julio Bracho, Alberto Estrella, Lumi Cabazos, Daniel Giménez Cacho, Cecilia Suárez, además de un muy bien armado reparto con actores mexicanos con experiencia en cine y no sólo emanados del ámbito telenovelero.

La serie va en su segunda semana de proyección, superando todas las expectativas de audiencia, e incluso después de transmitir los primeros capítulos a manera de maratón de fin de semana.

El asunto da como para revivir el muy añejo debate sobre la televisión de calidad en México. El caso es que la gente demuestra interés por ver algo diferente, de buena calidad, bien actuado y bien escrito. Tira por tierra el supuesto de que la gente está acostumbrada a ver lo que le pongan, indefensa ante la pantalla y la publicidad.

Es también interesante porque - a pesar de que la tentación debe haber sido mucha- en esta ocasión Televisa optó por construir trece capítulos a manera de viñetas sobre un proceso histórico, sin añadir historias de amor y melodrama paralelas y ficticias, como ya habían hecho en La antorcha encendida y El vuelo del águila.

Sin embargo, dista mucho de ser una versión objetiva del proceso histórico, no puede evitar decantarse a hacia una versión oficialista y superficial del proceso, aunque con un esfuerzo de desacartonar un poco a los héroes nacionales.

Un buen producto de entretenimiento que no es un documental especializado, pero tampoco una telenovela. Una clase de historias por televisión que por lo menos tiene como base  información mejor estructurada que las monografìas que venden en las papelerías. Recomendable por supuesto, ante la falta de mejores opciones en televisión abierta.