Héctor y la Búsqueda de la Felicidad

Manuel Cruz

@cruzderivas

La felicidad puede ser simple. Pero no para Hector (Simon Pegg). Quizás porque su labor como un psiquiatra neurótico requiere ayudar a otros a encontrarla. Quizás porque su romance con Clara (Rosamund Pike) es perfecto. Demasiado. Así, Hector se lanza en un viaje alrededor del globo con la intención de entender, ¿qué hace a la gente feliz? No hay problema en que el cine lleve alegría a su público, pero en un mundo repleto de publicidad absurda y optimismo materialista, la cinta - y la pregunta que hace - podría volverse innecesariamente cursi.

Pero no es el caso para Hector y la Búsqueda de la Felicidad. La duda que persigue a su protagonista es honesta, y las respuestas que arroja su historia, también. Al inicio de su viaje, Hector encuentra ejemplos predecibles de la felicidad, como un millonario en la mitad de China (Stellan Skarsgard), que le revela su perspectiva sobre el abstracto tema en un montaje de lujuria y exceso. Hector, como cualquier psiquiatra decente, carece de un purismo disfrazado de moralidad y acepta esa primer idea, revelando la innovación central de la cinta: no es conservadora. La felicidad podrá ser muchas cosas, y Hector está dispuesto a encontrarlas. Esto lo lleva a múltiples escenarios fundamentalmente cómicos, pero con sorprendentes giros emocionales. Detrás de un excentricismo colorido hay una búsqueda realista, que gradualmente se aleja de el tema de la felicidad para enfocarse en Hector. Al final es una historia de amor y esperanza, narrada con un ingenio y verosimilitud refrescante.

Peter Chelsom, director de la cinta, presenta una estética astuta para determinar el estado emocional de su protagonista y el progreso de su búsqueda (incluyendo acertadas referencias al legendario Tintin) Pero la actuación de Simon Pegg es central al éxito de su historia. Pegg no es extraño a la excentricidad e ingenio cómico - relativamente británico - que rodea a su personaje, pero ofrece el rango necesario para los momentos que no son de risa. Su personaje tiene más de una emoción, y Pegg, consciente de ello, lo respalda. Lo mismo ocurre con Rosamund Pike y Clara, cuya creciente preocupación por las extrañas aventuras de su novio le otorga credibilidad y empuja la historia hacia posibilidades interesantes, culminando en una escena climática que demuestra - exitosamente - la relación entre ambos.

El resto del elenco, que incluye a Toni Colette, Christopher Plummer y Jean Reno interpretando una versión ligeramente modificada de su personaje en Léon ciertamente ayuda a continuar con el humor, pero el secreto de Héctor y la Búsqueda de la Felicidad está en el respeto intelectual por su tema. La felicidad y la vida no son cosa fácil, aún si al final hay esperanza.