Convencida de hacer de las inevitables convalecencias de fin de semana algo creativo, he decidido inaugurar formalmente la sección “Crónicas de interferón” con la reseña de Hooligans que transmitieron en el canal MGM este fin de semana. En esta sección encontrarán notas de programas de televisión y películas, -algunas ya vistas por todo el público- pero que vale la pena reseñar, para ampliar nuestro panorama de crítica y opinión. Y si se les ocurre un mejor nombre para la sección, se aceptan sugerencias. Dicho lo cual, aquí la reseña de la película.
Hooligans (Green Streets Hooligans) Gran Bretaña 2005
- Dir: Lexi Alexandre
- Reparto: Elijah Wood, Charlie Hunnam, Claire Forlani, Marc Warren, Leo Gregory, Geoff Bell, Kieran Bew, Henry Goodman, Christopher Hehir, Terence Jay
[rating:3/5]
Para empezar hay que decir que a lo mejor por el título, uno piensa que se trata de una película sobre el fútbol y su penetración cultural en Inglaterra. Nada más equivocado. Si bien el fútbol es una condición constante, hay muy pocas escenas de partidos o elementos futbolísticos presentes. Esta es una historia paralela acerca de las vidas de quienes participan en las llamadas “barras.” El fútbol es vuelve solamente el pretexto para descubrir la crónicas de poder, violencia, lucha territorial y supremacía entre bandas, que está más cerca de Gangs of New York que de Gol, (1y2) por ejemplo
La historia cuenta como Matt Buckner (Wood) aspirante a periodista y estudiante de Harvard, se ve envuelto en un enredo con drogas, donde tiene que echarse la culpa y aceptar un soborno de 10 mil dólares por parte de su adinerado compañero de cuarto, quien no puede manchar su buen nombre por estas nimiedades. Una vez expulsado, Matt va a Londres a buscar a su hermana (Forlani) quien vive allá con su esposo e hijo. El marido tiene un hermano (Hunnam) que liderea una de las barras del United, siendo así como Matt pasa del glamoroso mundo de Harvard a la peleas callejeras londinenses.
Y el melodrama puede ser totalmente predecible, pero esta aderezado con escenas gráficas de peleas callejeras que hacen interesante el asunto ( que quieren, el morbo vende). Es raro ver a Wood como un perdido paria en medio de tanta violencia manteniendo su atónita mirada azul y su cara de "no rompo un plato." Pero al final termina por convencernos de que siempre hay que comparar los dos lados de la moneda, y los salvajes aficionados ingleses que han sido objeto de repudio en todo el mundo, también tienen una historia con fuerte dosis de drama humano que contar. Total que para neófitos en el asunto resulta muy interesante. Para aficionados ni se diga. Y para que nunca se pierden una buena coreografía de pelea en una película, definitvamente no pueden dejar de verla.
Lo mejor:
- La honestidad con la que está hecha. No hay vencedores ni vencidos, no hay víctimas ni victimarios. Tampoco se culpa al sistema, a la pobreza, al sistema educativo. Se trata de gente que ha podido tomar sus propias decisiones, por muy equivocadas que sean.
- Las coreografías de peleas están todas impecabl mente realizadas.
- La escena de los niños jugando fútbol.
- Comprobar que Wood si es un Hobbit mediano: No les llega ni al hombro a la mayoría de los protagonistas.
Lo peor:
- No apta para quien no gusta de la violencia explícita.
- No apta para quien gusta del melodrama rosa
- No apta para quien espera ver una cinta futbolera
- No apta para quien no entiende el fútbol sin violencia en las tribunas.( y eso va para quien no concibe el América - Chivas sin el clásico agarrón en las tribunas).