Sin ánimos de hacer a un lado la trágica muerte de Robin Williams, no deja de llamar la atención que el hecho ha opacado una de las grandes pérdidas de la cinematografía mundial: Lauren Bacall. Esta mujer no sólo se dio a conocer por ser una de las más grandes bellezas de esa época, algo que reconoció la mismísima Marilyn Monroe, sino que además fue uno de los más grandes talentos de la época.
Nacida como Betty Joan Perske el 16 de septiembre de 1924, inició su carrera como modelo, para ser descubierta por el director Howard Hawks, debutó en la cinta To Have and Have Not, al lado del reconocido actor Humprey Bogarth. De ahí se inició no sólo una carrera vertiginosa, sino uno de los más notorios romances de todo Hollywood.
Entre sus mejores interpretaciones se encuentran The Big Sleep, Dark Passage, Key Largo y Murder on the Orient Express, muchas de ellas al lado de Bogarth. De hecho, la mujer se mantuvo activa hasta el día de su muerte, pues trabajaba en la producción de Trouble Is My Business cuando vino su deceso.
Obviamente, el que la muerte del actor haya sido suicidio, algo que siempre es más impactante para el público en general, marcó mucho el que haya llamado mucho más la atención. Sin embargo, no deja de ser una injusticia para una de las mujeres más talentosas del cine.