Para aquellos que recuerden la vieja moda de los ochentas de hacer cine relacionado con festividades dentro del género gore, seguramente recordarán la producción canadiense de 1981 My Bloody Valentine. Pues para los nostálgicos, y aquellos que no pudieron verla en su oportunidad, les comunicamos que este 14 de febrero podrán ver el remake de la misma, en 3D. A diferencia del original, que fue hecho con un muy limitado presupuesto, esta nueva versión tiene un gasto enorme tras de sí, aunque no se apoyó en ninún gran actor, aunque el elenco es de buen nivel. Es una buena opción para variar en esta fecha, pues cuando menos nos mostrará que la expresión entregar el corazón puede tener más de un significado.