Tras de un buen rato de alejarse de su línea, Almodóvar vuelve a experimentar con una comedia, esta vez con un giro bastante inusitado. Al borde de un desastre irresoluble, los pasajeros de un avión con destino a la Ciudad de México comienzan a encontrarse con sus propias vidas y, ante la inevitabilidad del destino, comienzan a mostrarse tal cual son. En esta cinta, el directos cuenta con cameos de muchas de sus grandes estrellas, pero sus protagónicos son diferentes a repartos usuales. No esperemos una cinta muy profunda, pues es notorio que el director buscaba divertirse con esta película, lo que nos garantiza que tendremos una manufactura relajada, simpática y llena de momento muy disfrutables. Realmente valdrá la pena dedicarle un tiempo, les aseguramos que no se arrepentirán.