¿Qué ha sucedido? Parece difícil de creer pero después de veinte años controlando la franquicia, los hermanos Weinsten han perdido los derechos cinematográficos sobre el Halloween de Michael Myers, uno de sus principales activos comerciales. Los derechos han vuelto a Miramax Films, anterior compañía de los hermanos, actualmente en manos de Filmyard Holdings.
La nueva compañía propietaria de los derechos parece que está buscando la forma de producir una película sobre el personaje ya que actualmente se limita prácticamente a la explotación de su librería de títulos.
¿Cuáles serán las consecuencias?
La primera es que se cancela Halloween Returns, una película que se estaba llevando a cabo sobre el personaje y que iba a dirigir Marcus Dunstan, quien también escribió el guión junto a Patrick Melton. Parece ser que ambos no trabajarán más en el proyecto ya que seguramente la nueva compañía buscara otro director y otro guionista.
Quien seguirá trabajando en el nuevo proyecto es Malek Akkad, productor de la franquicia durante veinte años y que junto a los hermanos Weinstein ha llevado a cabo cinco películas.
Los hermanos Weinstein
The Weinstein Company está preparando un nuevo proyecto. Un drama histórico que llevará por título The Current War y que pretende reunir a dos actores de gran talento como son Benedict Cumberbatch y Jake Gyllenhaal. Ambos interpretarían, respectivamente, los papeles de Thomas Edison y George Westinghouse en esta película que ha sido escrita por Michael Mitnick y será dirigida por Alfonso Gomez-Rejon.
Recientemente informamos acerca de las primeras y geniales críticas de la película The Hateful Eight después de un pase exclusivo para críticos y periodistas. Ahora es Harvey Weinstein quien da su opinión acerca de la película hasta el punto de calificarla como comedia y querer que forme parte de la sección de “Comedia y musical” de los próximos Globos de Oro.
La primera parte es una presentación.
El segundo acto es hilarante. Es su película más divertida, más política, increíblemente entretenida. Te partes el culo de risa. Incluso la violencia está reducida para ser una película de Quentin Tarantino.
Yo pensaba que era una comedia. Quentin pensaba que era una comedia. Por sorprendente que parezca, el publico se parte viendo la película. Espero contra toda esperanza que cambien de parecer.