Olallo Rubio, ¿reír o llorar?

| |

Navegando por la web, me encontré este curioso mensaje.

Rayos a quien engaño, no estaba navegando por la web, yo estaba actualizándome con las irrelevantes noticias de Facebook, cuando me encontré con un mensaje en video publicado por Olallo Rubio, un mensaje de Anonymous titulado Operación 22 de noviembre.

Pues veamos entonces que va a hacer este grupo revolucionario el 22 de noviembre, y sobre todo que tiene que ver Olallo Rubio con todo esto.

Ah, tenía que ser.

Si Olallo ya sabemos que sabes usar la tecnología, que tienes una cámara, que se te acabaron las ideas y te tienes que colgar de otras cosas creativas para que la gente te vea y te escuche.

Digo, no es muy creativo este anuncio que se hizo Rubio para relanzar a la fama su decadente decaído podcast, sí, lo digo con tristeza, yo solía ser fan from hell; cuando Olallo tenía cosas que decir, cuando sus quejas realmente eran un catalizador social de lo que muchos nos queríamos quejar colectivamente en voz alta, cuando Olallo explotaba de creatividad y explotaba contra muchos sectores radicales y conservadores políticos, sociales, o cuando simplemente se quería quejar de los niños fresas de la condechi. Aquellos tiempos cuando si era un líder de opinión, antes de que se le acabaran las ideas, mucho antes de querer ser un director de cine, mucho antes de que toda una temporada de su podcast fuera un publirreportaje primero de “y tu cuanto vales” para terminar con una temporada muy mala y sin chiste dedicada casi en su totalidad a “This is not a movie”, cuando el podcast no tenía las molestas apariciones del Web Master y personajes que no tenían sentido, personajes que tenían que forzosamente darle continuidad a una idea mal desarrollada.

Después de ver los primeros 30 segundos del video, pensé, sí es un video de Anonymous, después del segundo 45, dije “ay si Olallo lo que haces para que te vean”; digo, a lo mejor si la duración de este video hubiera sido de no más de 2 minutos, hubiera pensado que se está refrescando y que busca nuevas formas de comunicarse, pero con 5 minutos de rollos raros y revueltos, repetitivos y muy reiterativos para que lo escuchemos y todos descarguemos el 22 de noviembre su podcast como si la vida se nos fuera en ello, me parece que es un desesperado intento por atención.

Creo que a veces hay cosas que se deben terminar con dignidad, cuando todos las apreciamos como algo fuera de serie, si no caen en clichés como las Desperate Housewives que debieron terminar en la temporada 3 o muchos otros programas que solían ser tan pero tan buenos, que ahora es triste ver en donde cayeron.

El reto de Olallo ya no es hacer otro podcast u otra película rara en formato podcast visual, tampoco es atraer a los pocos fans que quedan o a curiosos, más bien morbosos que se quejen de lo mala que es la nueva temporada, ni hacer parodias tontas de Anonymous, el reto está en buscarse otros proyectos tan creativos y subversivos como lo fue en sus buenas épocas el Podcast de Olallo Rubio, un proyecto, una idea que comunique lo que estamos experimentando en el 2011, somos personas diferentes, son tiempos diferentes.

Olallo Rubio o se reinventa o se muere, mediáticamente hablando.