Para utilizar balas dentro de una película amateur, el secreto está simplemente en el actor, y en algunos trucos bastante sencillos, pues una arma de fulminantes es más que suficiente. Sin embargo, hay ciertos casos en que las cosas no son tan sencillas, como es cuando tienes que disparar contra un vidrio. Y a menos que quieras emular a Juan Orol, que podía matar a alguien del otro lado de una ventana sin romper el cristal, tendrás que usar algunos trucos sencillos.
De entrada, lo mejor será que uses el vidrio de azúcar que ya aprendimos a hacer, para que todo el proceso sea seguro. Después, necesitas la receta de pólvora negra que también ya usamos en otro post. Prepara una cantidad pequeña de la misma y ponla dentro de un papel bien envuelto, para después sellarlo muy apretado con cinta canela o de ducto. Pero antes de sellarla, introduce la punta de dos cables muy delgados, de modo que las puntas se toquen entre sí. El paquete debe de ser muy pequeño y, aunque apretado, no debe de serlo demasiado, de modo que la explosión sea suficiente, sin ser peligrosa.
Coloca el vidrio de azúcar en la ventana que vayas a romper, y pega la carga explosiva en una de las esquinas, de modo que no sea visible. cuando necesites que se rompa, pon el otro lado de los cables en los polos de una batería - nunca uses electricidad más fuerte, pues es más riesgoso - y deja que la detonación quiebre el mismo. Recuerda que, aunque el vidrio de azúcar es menos peligroso, es necesario tener ciertas precauciones al hacerlo. Trata de que tu actor no esté muy cerca, y tú utiliza un cable lo suficientemente largo. De esa forma, tendrás un efecto muy aceptable, y podrás volar un vidrio sin necesidad de demasiada tecnología.