Esta es la historia de uno de los grandes héroes anónimos del cine. Han llorado por él, las mujeres han querido morir por él ¿Pero cuándo se le ha dado crédito? ¿O ha conquistado a la chica? Nunca.
The Fallout Guy
Muchos de nosotros hemos oído el término, e incluso estamos seguros de saber que significa, pero en realidad, no siempre tenemos una idea clara de qué son. En esta ocasión, vamos a echarle un vistazo a una de las profesiones más ingratas de la cinematografía.
Stuntman: Son en los que todos pensamos cuando oímos la palabra doble. Usualmente, son los que substituyen a los actores para escenas demasiado peligrosas, o que exigen una mejor condición física que la que tienen. Pero algunas veces, actúan como extras en ciertas escenas en donde uno normal no podría estar. Recuerden en las persecuciones los que tienen que hacerse a un lado de pronto al venir el auto, o los transeúntes que están junto al edificio que explota, y los verán en acción.
Dobles de cuerpo: Son aquellos que sirven para que el actor luzca bien. suelen hacer las escenas de desnudos cuando el actor o actriz no está dispuesto/a a hacerlos, o cuando su cuerpo no es tan atractivo como deseara. En algunas ocasiones, la actriz real hace el desnudo, pero cuando es tocada o en los momentos de más contacto, es la doble quien lo hace, para evitar molestias a la protagonista.
Doble de habilidad: Los poco conocidos pero indispensables skill doubles, son los que entran en acción cuando un actor carece de una habilidad específica, pero que no es peligrosa de realizar. Muchas veces no son dobles profesionales, sino expertos en esa disciplina que aceptan cubrir al mencionado. Aquí hablamos de tenistas, pianistas, escultores y otro por el estilo, en donde únicamente vemos unas manos trabajar, y suponemos que es el actor o actriz. En esta categoría entran también aquellos encargados de grabar los segmentos cantados cuando el actor no tiene el talento.
Como podemos darnos cuenta, se trata de personajes casi desconocidos, pero que no por ello podemos ignorar. A fin de cuentas, sin ellos muchas de las actuales películas resultarían imposibles.