Pocos géneros han creado tal cantidad de clichés y elementos definitorios como el cine gore, más que nada por ser un tipo de historias que giran alrededor de una premisa bien establecida, en donde los cambios son relativamente menores. Es dentro de esta línea que aparece uno de los personajes más estereotípicos del cine, la llamada Scream queen.
Este personaje es usualmente una muchacha joven y atractiva, cuya función básica es el gritar al enfrentarse al asesino en turno. Usualmente, ésta es asesinada prácticamente de inmediato, aunque hay casos en que ésta puede ser también la última chica, salvándose por un pelo de los embates del criminal. La parte importante de éstas es el terror que puedan proyectar, y como su mismo nombre lo indica, la calidad y volumen de los gritos que pueda proporcionar. DE hecho, este estereotipo ha sido criticado muchísimas veces, en especial por grupos feministas, pues consideran que minimizan el papel de la mujer al de un ser indefenso que tiene que ser rescatado. Sin embargo, como todo, esta imagen se ha adaptado a la época moderna, pues ahora muchas scream queens se defienden a sí mismas, y pueden llegar a ser quienes terminen con el criminal, pero eso sí, sin dejar de gritar en todo momento.
Dentro del cine clase B, muchas actrices han hecho literalmente toda su carrera alrededor de sus habilidades vocales, y muchas de ellas son ya un clásico. Entre ellas, resalta la figura de Michelle Bauer, quien pasó a ser uno de los íconos del mismo.
