Cada que termina un año más, nos decimos a nosotros mismos, nos prometemos, nos juramos, nos auto convencemos de que el próximo año ahora si cambiaremos, mejoraremos o probaremos nuevas cosas. Un par de días antes de la noche vieja nos preparamos mentalmente para dar un enorme paso para ser lo que siempre hemos querido ser; preparamos nuestros choninos del color en el que necesitamos más suerte (verde, amarillo ó rojo), alistamos nuestros dólares, las velitas, nuestras uvas y demás parafernalia que se nos pueda ocurrir, todo para empezar con el pie derecho el 2009.
Desafortunadamente tú y yo sabemos muy en el fondo que nada de esto te va a funcionar y vas a seguir igualito que hasta ahora, un holgazán/a, flojo/a, vicioso/a, parrandero/a, que nunca jamás se va a reformar; pero vele el lado bueno, la vida que llevas es una muy buena vida, llena de placeres, alegrías, gustos y sorpresas. Porque tienes que cambiar todo aquello que tanto te gusta, para que complacer a alguien más, chihuahua que te acepten como eres y vive tu vida como a ti te gusta.
Revelémonos contra el sistema y propongamos una lista de resoluciones diferentes, modernas y realistas. Una lista de 12 o más deseos que nos hagan realmente felices, que nos ayuden a disfrutar nuestro paso efímero por este pequeño mundo.
Celebremos la rebeldía y hagamos todo aquello que nos plazca, como pasar horas frente a la televisión viendo un montón de películas o perdiendo el tiempo con aquellos videojuegos que tanto nos gustan, estar fodongeando en tu casa en pans o pijamas todo el día sin importar que sea martes, echarte unas chelas con tus cuates, o porque no gastarte todo tu sueldo en aquello que tanto te gusta como la ultima temporada de The Office, porque no también es una buena idea irte de pinta al cine todos los viernes, seguro no te extrañaran mucho en clases y total no te vas a perder de nada.
Podemos aprender del maestro Bart y hacer lo que nos dicte nuestro niño interior, disfrutar y vivir, caernos y aprender; después de todo tenemos las resoluciones del 2009 para empezar bien ese año.
La pista 4:
Ese día pitufiviajamos todos