Por @carolinnatas
El director coreano de culto Joon-ho Bong, entra de lleno a una producción de habla inglesa con clase, en esta ocasión se trata de una cinta con toques de acción y ciencia ficción cuya trama gira en torno a un fallido experimento para detener los efectos del calentamiento global, donde los sobrevivientes se trasladan a bordo de un tren en movimiento, evitando el exterior y las consecuencias de una era de hielo fatal.
No hay más vida en la Tierra, excepto la de aquellos que están en el tren Snowpiercer, que circula indefinidamente alrededor del mundo y provee un ambiente de convivencia entre sus habitantes. Como en cualquier distopía del cine, los arreglos a bordo no son equitativos al dividir la locomotora en clases sociales. La clase alta pertenece al frente, mientras que los menos privilegiados son relegados a la cola, dejándolos sin esperanza de avanzar en su estatus. Este acuerdo permanece estable la mayor parte del tiempo, hasta que los más necesitados deciden rebelarse y tener su oportunidad de felicidad y comodidad que hasta ese momento sólo pertenecía a un grupo selecto.
La cinta -de esta manera- se enfoca en la rebelión liderada por este grupo de gente mientras hacen su ascenso para enfrentarse al misterioso creador del tren. ‘El Expreso del Miedo’ explora la estructura de la sociedad, donde el pobre es obligado a sufrir y comer barras de proteína, -ignorando de qué están hechas-, mientras sufren cualquier tipo de abuso de la única persona de la élite que conocen; la ministro Mason (Tilda Swinton). Para un hombre joven como Curtis (Chris Evans) y sus amigos Edgar (Jamie Bell), Tanya (Octavia Spencer) y Andrew (Ewen Bremner) es demasiado, por lo que dicen ayudar en la revuelta a su mentor Gilliam (John Hurt), en la que Tanya y Andrew planean recuperar a sus hijos, quienes fueron llevados a la fuerza por órdenes que venían del grupo de los superiores. Para Curtis, ver a amigos morir y a niños perderse, es motivo suficiente para luchar, mientras que al cruzar cada puerta del tren diseñada por Minsu (Song Kang-Ho) y su hija Yona (Go Ah-sung) el grupo se encontrará con toda clase de terror y cosas que no tienen sentido que les demuestran qué tan oprimidos están.
Mientras la acción se desarrolla poco a poco, la increíble visión de su director, es comprendida rápidamente. El tono que crea es una interesante mezcla de estilos. Primero, los estrafalarios personajes, los inusuales detalles en el set, la violencia visceral y los extremos niveles de la depravación humana que recuerdan las raíces del director en el cine coreano. Sumado a esto, la alta calidad visual y las caras conocidas, hacen de este un interesante filme. Cada elemento está al servicio de un emocionante viaje.
La dirección de Bong, es escalofriante en la forma que mantiene un sentido de la atmósfera mientras es filmada casi en su totalidad dentro de un tren. Existen pocas tomas amplias y del exterior, aunque el papel en mayor parte lo juegan los close-ups y los movimientos interesantes de cámara, que ayudan a mantener el suspenso. También hay un elemento lleno de claustrofobia gracias a que un par de compartimientos del expreso se prestan para ello y a algunas imágenes gráficas de violencia donde el director decide hacer uso de distintos métodos de rodaje desde la cámara en mano hasta acercamientos más controlados.
El director de fotografía Hong Kyung-pyo hace un maravilloso trabajo, de la mirada sucia y la iluminación en algunas de las secciones del tren, a la gama de estilos para jugar en los diferentes aspectos de dichas divisiones y mostrar su tono surrealista y fuera de lo común. Los editores Steve M. Choe y Changju Kim hacen un buen trabajo de igual manera, al crear ritmos únicos que repercuten directamente en la acción, el drama y el humor negro de la cinta.
Además, el elenco principal de protagonistas es fuerte por igual, dando en el clavo cada emoción para dar lugar al flujo natural de las cosas. Tilda Swinton es grandiosa como la ministro Mason. Su personaje es caricaturesco y fuera de onda al intentar afirmar su autoridad pero ser en realidad una cobarde. Jamie Bell como el mejor amigo que ayuda en cualquier tarea mientras hace un par de cosas graciosas y es confiable bajo cualquier circunstancia. Song Kang-ho es fenomenal como el diseñador de las puertas que posee un talento único al tener entendimiento de lo que pasa dentro y fuera del tren. Finalmente, Chris Evans en una actuación notable como el rebelde líder que ha sufrido bastante y tiene en su mente la firme idea y el plan para acabar con todo.
Como resultado, ‘Snowpiercer’ mantiene un alto nivel de energía que te conserva en un subidón de adrenalina hasta llegar al conmovedor clímax. El escenario de la película puede ser limitado pero definitivamente se siente genial en todos los sentidos de la palabra.
‘Snowpiercer’ es una muy buena cinta de Joon-ho Bong. Armada con un gran elenco, así como temas atractivos de la humanidad, distopía y la estructura de clases sociales, es un filme que se las arregla para hacer varias cosas a la vez; no es sólo acción con cerebro, también tira algunos golpes con buen humor, dando en el clavo en más de una ocasión. Hay mucho que apreciar en la producción. Incluso cuando los cambios de tono se pueden volver un poco molestos, siempre invita a ver, escuchar y reflexionar con gran interés.
FICHA TÉCNICA
Título: El Expreso del Miedo (Snowpiercer)
Dirección: Joon-ho Bong
Guion: Joon-ho Bong, Kelly Masterson
Reparto: Chris Evans, Jamie Bell, Octavia Spencer, William Hurt, Tilda Swinton, Kang-ho Song, Ewen Bremner, Go Ah-sung, Ed Harris
Género: Acción, Ciencia Ficción, Drama
Duración: 126 minutos
Año: 2013
País: Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, República Checa
Fotografía: Kyung-pyo Hong
Música: Marco Beltrami
Distribuidora: Gussi Cinema
Fecha de estreno: 02 de octubre de 2015