Seguramente el fenómeno en que se ha convertido Crepúsculo (Twilight) y lo que ya se espera como una larga lista de secuelas, alimentará muchos debates como estos. Las comunidades de fans de ambas historias ya se alistan para lo que se prevé como la controversia de fin de año. Así que como toda buena plática de café, hay que empezar con una pregunta disparadora: ¿es mejor Harry Potter que Crepúsculo?
La respuesta - como casi cualquiera que tenga que ver con estos temas- es relativa. A los fans de uno y otro lado les parece que no hay nada comparable - de hecho: ¡por eso son fans!- mientras que para los detractores de cada uno, son la peor porquería que han visto o leído.
Pero afortunadamente, todo debate supera la barrera ideológica y subjetiva gracias a los datos duros. Y en esos términos, hoy por hoy ambos fenómenos se pueden medir desde dos diferentes ámbitos: los libros y las películas.