Una producción cinematográfica está abierta a muchos cambios. Sustitución de actores o actrices, despido del director o fichaje de un nuevo guionista son algunos de los más destacados. Estos cambios pueden hacer que una película pase de ser muy buena a muy mala, o viceversa. En este caso, hablamos de importantes cambios en la dirección.
Recogiendo un artículo de nuestros compañeros de Cinemanía, traemos tres producciones de cine que tuvieron grandes cambios centrados en su director, y que realmente nos hacen preguntarnos cual hubiera sido el resultado de la película con dicho director, porque ciertamente son algunos de los mejores del cine de la historia.
Tres películas que pudieron tener un director muy diferente.
3. The Wolverine, dirigida por Darren Aronofksy
Este cineasta es uno de los más destacados desde hace muchos años por su estilo propio, que ha plasmado en grandes películas a lo largo de su carrera (Requiem for a Dream, 2000 - The Wrestler, 2008 - Black Swan, 2010). Todo parecía indicar que una de sus producciones sería la segunda película individual de Lobezno, pero no fue así.
El director decidió abandonar el proyecto antes de comenzar el rodaje en Japón, por lo que nunca sabremos cómo habría sido su película con este héroe. Fue entonces cuando James Mangold tomó el control de la dirección. Como curiosidad cabe destacar que no fue la única película del universo que Darren Aronosky rechazó dirigir.
De hecho, también estuvo muy cerca de ponerse a los mandos de Batman: Año Uno. Sin embargo, decidió abandonar la producción, que pasó a manos de Christopher Nolan, cambiando también el título a Batman Begins, siendo la primera película del universo heroico que los espectadores se quedan con las ganas de que la dirija el cineasta.
2. Godzilla, de Akira Kurosawa
El enorme monstruo que lleva décadas aterrorizando el mundo del cine tiene un total de veintisiete películas. Quizás son demasiadas, pero una de ellas, en concreto la segunda, pudo haber estado dirigida por el legendario cineasta Akira Kurosawa. Sin embargo, el gran presupuesto que quería para la película hizo que no pudiera hacerlo.
El director japonés acudió al rodaje de la película original, que se estrenó en 1954, para aconsejar a su amigo Ishiro Honda. Le gustó tanto la idea para la película que comenzó a trabajar en un guion para una secuela. Una segunda parte que pudo haber sido una de las maravillas del cineasta, pero la productora Toho dijo claramente que no.
Como decimos, parece ser que todo se debió al gran presupuesto que el director japonés quería para realizar la película. Nos imaginamos el trabajo que hubiera hecho el responsable de obras maestras del cine como Rashômon o Los siete samuráis.
1. The Lord of the Rings, de John Boorman
Esta saga cinematográfica siempre será una de las mejores de la historia. Tres maravillosas películas sobre el universo literario creado por J.R.R. Tolkien. La verdad es que Peter Jackson hizo un trabajo magistral, por lo que seguramente ninguno de los amantes de esta saga cambiaría de ninguna forma al director.
Sin embargo, ciertamente hubo otros nombres candidatos para dirigir al menos la primera película. Entre otros está el legendario Stanley Kubrick, pero el autor de los libros lo rechazó. Uno de los más destacados fue también John Boorman, quien escribió un guion junto a Rospo Pallenberg. Un guion muy diferente al que se realizó.
Algunos de los detalles que tenemos sobre esta historia es que los personajes de Frodo y Galadriel hacían el amor, o que los Hobbits eran niños con barbas postizas. El proyecto fue cancelado, y la película nunca se realizó. Lo que sí pudo realizar el director fue una de las también consideradas obras maestras de la historia del cine: Excalibur.