El que una película se vea realista, depende muchas veces de los pequeños detalles. Los aspectos históricos o geográficos de una película son muy importantes, pero a veces cuestiones como la continuidad pueden destrozar la imagen que tiene el espectador. En esta ocasión, te presentaremos algunos pequeños trucos de continuidad para que logres minimizar estos problemas.
Cuando tengas puesta una mesa, escritorio, superficie de trabajo u otra que tenga varios objetos, marca con cinta adhesiva o lápiz los lugares en donde estará cada objeto, y más si durante la escena debe de buscar o mover los mismos. Toma en cuenta también que, si debe de romper algo como un vaso, hoja de papel, estatua o cuaderno, debes de tener cuando menos cuatro idénticos, o cuidar extremadamente la toma para que no haya errores.
Cuando el personaje coma o beba, lo mejor es que sólo haga los ademanes, o que la acción se lleve frente a los platos servidos, sin beber o comer nada. De ese modo, el nivel y acomodo de los platos y las bebidas no cambiarán, y será más fácil cambiar o repetir escenas.
Haz una lista de absolutamente todas las prendas que estés vistiendo al entrar a escena, y de ser posible, tómale una foto digital a cada actor antes de iniciar la toma. Detalles como pañoletas, corbatas o collares deben de tenerse en especial atención, de modo que queden acomodados de la forma más parecida posible.
Todos estos detalles pueden parecer muy exagerados, pero realmente son necesarios, cuando menos si esperas tener una cinta lo más fiel posible.