Whiplash: experiencia cinematográfica vibrante, intensa y original

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En una temporada de premios en donde las principales cintas giran en torno a biopics, género bélico o genios científicos, ‘Whiplash Música y Obsesión’ llega como una bocanada de aliento fresco logrando sobresalir con éxito, haciéndose acreedora a cinco nominaciones al Óscar incluyendo Mejor Película y Mejor Actor de Reparto (J.K. Simmons).

Entre los detalles que le agregan mérito a una cinta, está la habilidad de llegar a más público, olvidando que el cine se trata sólo de éxito comercial y grandes cantidades de audiencia. Un film no es sólo explosiones y caras bonitas, sino dedicación, destreza y corazón. Esas son algunas de las cosas que no solo la cinta posee, sino el equipo encargado de crearla también.

Desde su premier en el Festival de Cine Independiente de Sundance en enero de 2014 en forma de cortometraje, ‘Whiplash’ ha tomado por sorpresa a críticos y cinéfilos. En superficie, es una historia acerca de una dura relación entre un estudiante y su mentor que sobrepasa los límites, pero por dentro, se trata de un penetrante análisis de una mente desenfrenadamente ambiciosa que no se detendrá ante nada.

Andrew Nieman (Miles Teller) es un dedicado estudiante de primer año en un prestigioso conservatorio de música en Manhattan que sueña con convertirse en un gran baterista de jazz. Cuando se le ofrece la oportunidad de tocar en el grupo principal de dicho lugar, Andrew rápidamente descubre que su director de orquesta Terrence Fletcher (J.K. Simmons) es un tipo diferente a cualquier otro que haya conocido antes. Fletcher intimida, humilla y usa cualquier forma de abuso verbal para presionar a sus músicos y especialmente a Andrew para alcanzar niveles más altos. El tormento de Fletcher y el ímpetu de Andrew los lleva a un enfrentamiento constante durante la cinta, convirtiéndola en un muy buen thriller psicológico que se hace acompañar de muy buena música. Somos testigos de la forma en que Andrew se aísla de su vida personal para enfocar su energía total en alcanzar su más deseado sueño. El joven tiene el impulso y la ambición para lograrlo pero, ¿a qué costo lo conseguirá?

Miles Teller y J.K Simmons mano a mano en 'Whiplash'. Foto de Daniel McFadden - © Cortesía de Sundance Institute.
Miles Teller y J.K Simmons mano a mano en 'Whiplash'. Foto de Daniel McFadden - © Cortesía de Sundance Institute.

El joven guionista y director de ‘Whiplash’, Damien Chazelle, ha descrito la cinta como una historia de origen de los músicos de jazz de la época dorada y se nutre de los mitos de héroes del género como Charlie Parker, buscando con urgencia al próximo ídolo de jazz, pero con ello viene una gran ironía. El género de la música es conocido como uno donde impera la libertad de expresión pero aquí el jazz es impersonal y mecánico, nublando el juicio ético de los personajes. Aun así, Fletcher es un hombre que puede saber si tienes el tempo correcto en un compás.

J.K. Simmons es tan bueno como dicen que es. Es una fuerza de la naturaleza con una presencia aterradora. Pero no es una actuación de una sola nota. El actor es subversivo con momentos de debilidad, inseguridad y cercanía. Es un personaje que no es fácil de querer, sin nada bueno que decir, aun así, sentirá una atracción hacia su enigmática presencia. Fletcher representa al diablo sobre nuestros hombros dedicado a gritarnos que no somos lo suficientemente buenos haciendo de sus palabras venenosas más una parte del alma de Andrew que una técnica de enseñanza legítima. Simmons es la apuesta más segura y merecedora al Óscar en su categoría.

El estruendoso ritmo de ‘Whiplash’ mantiene el corazón de la audiencia en la garganta. Damien Chazelle ha convertido su premiado cortometraje de Sundance en una fascinante película con mensaje brutal, que se presta para discusión y debate. Está comprometido con expresar lo que significa físicamente ser un baterista de alto nivel y Miles Teller –que en cada producción lo va haciendo mejor- lo captura sin descanso sin sentirse forzado. Su implacable energía es indudablemente atractiva. Aun así, es Simmons quien se apropia de la cinta, sin que nada ni nadie nos haya preparado para la clase de actuación que el veterano actor nos entrega.

J.K. Simmons es una presencia aterradora en 'Whiplash'. Foto de Daniel McFadden - © Sony Pictures Classics
J.K. Simmons es una presencia aterradora en 'Whiplash'. Foto de Daniel McFadden - © Sony Pictures Classics

El virtuosismo de su guion nos permite entrar en la mente de Andrew. Cada giro en la historia amolda sus expectativas y ambiciones, escalando hasta el punto indicado. Mientras la película es una experiencia apasionante, en retrospectiva, quizás es cínica al sugerir que para alcanzar tus metas debes privarte de todo lo demás, algo que tal vez puede ser un verdadero reflejo del abundante y evidente aislamiento que las generaciones de hoy atraviesan.

Los aspectos técnicos son como pequeños estímulos al hacer uso de acercamientos editados al punto con elegantes movimientos de cámara. Es igualmente impresionante que se hayan logrado tomas y desplazamientos tan complicados en tan sólo 19 días de filmación. Rica en emoción, tensión psicológica y subtexto personal, ni apresura, ni arrastra en papel ni en pantalla. Es en verdad un film tan persistente como Fletcher, que se queda en la mente de uno durante días.

Chazelle ha logrado hacer de ‘Whiplash’ un preciso y tenso film, repleto de piezas colocadas a la perfección, sobre todo con amor a la música y a los retos que a menudo se presentan cuando luchas por llegar a la cima de tus metas. Esta es una cinta que retumba en cada nivel donde cada momento contiene abundante valor. Su director de tan sólo 30 años se ha empeñado en alcanzar la excelencia tanto como sus mismos personajes… y lo ha logrado.

FICHA TÉCNICA

Título: Whiplash Música y Obsesión (Whiplash)
Dirección: Damien Chazelle
Guion: Damien Chazelle
Reparto: Miles Teller, J.K. Simmons, Melissa Benoist, Paul Reiser, Austin Stowell
Género: Drama, Música
Duración: 107 minutos
Año: 2014
País: Estados Unidos
Fotografía: Sharone Meir
Música: Justin Hurwitz
Distribuidora: Sony Pictures México
Fecha de estreno: 23 de enero de 2015