Ya tenemos a los ganadores de la premier de Nikté

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En esta ocasión, realmente tuvimos un nivel de creatividad excelente, pues las historias estuvieron todas sumamente interesantes. Sin embargo, como en todo, necesitamos de un ganador, y aquí están los de esta ocasión.

Publicación y pase

  • José Borbón

Pase

  1. Cesar Sánchez
  2. Ismaél Viveros
  3. Adriana Escamilla
  4. Jonathan Cortés
  5. Edmundo Cortés
  6. Luis Mauricio Estrada
  7. Sharon Pérez
  8. Mariángeles Santillana
  9. Fabiola Durand

Y como lo prometido es deuda, aquí está el ganador

Mi experiencia con un chaneque

Mi viaje comienza en la entrada de la selva de Catemaco. La densa vegetación y el clima caluroso se prestan para ilusionarse con un encuentro extraño y místico. A pesar de que llevábamos un guía, esto no da pie a que nos sintamos mas seguros.

El guiá, cuyo nombre no recuerdo, nos invita a dejar en la entrada, todo lo que no necesitemos, así  como cualquier rastro de "modernidad", según sus palabras. Una vez hecho esto, nos baña con agua de una botella de plástico.

"A los hombres místicos, les desagradan los olores que no son naturales"

La ultima gota de agua recorre mi nuca y siento un escalofrío.

Nos adentramos en la selva justo en el cenit del día. Las aves y sus ruidos me hacen recordar las películas de búsquedas de tesoros, pero en esta ocasión mi vida esta en la pantalla y no hay espectadores.

No ubico bien cuanto caminamos. Sólo recuerdo el gran cansancio y el dolor en mis tobillos del esfuerzo de caminar en empedrado, selva, vegetación y lodo. Mis sentidos se adormecieron. Ni siquiera recuerdo cuando le perdí el rastro al guía. Lo que recuerdo es no sentir miedo. Simplemente, seguí caminando.

El camino, poco a poco se hizo más claro. Es como si la selva se abriera frente a mis ojos.

Al final de este camino, vi una serpiente. La adrenalina me ordenaba correr. Pero al levantar la vista, pude ver a nuestro anfitrión, el chaneque arriba de una roca, con la serpiente, ahora, a sus pies; obediente, fija, pendiente...

El hombre me hizo una señal, y me acerqué a él.

Dibujo un circulo en la tierra con un polvo rojo. Lo atravesó con una rama gruesa.

"Vida", me dijo. En mi mente, era claro el mensaje: Mi propia vida era el círculo. Me sentía perdido en esos momentos, sin rumbo, sin una meta real. Roto, de alguna manera.

Tras del hombre, una sombra, al parecer de un animal salvaje, se acercaba.

El chaneque solo me miró  fijamente y respiró profundamente. Instintivamente, lo imité.

Cerré mis ojos y sentí  al animal rodeando mis piernas.

"Natura". Al escuchar la voz del hombre, mi respiración se calmó y mis músculos se relajaron.

En mi cabeza, las voces decían "No tengas miedo. Es sólo el camino"

Tranquilo, abrí mis ojos y el anochecer y su inmensa oscuridad eran interrumpidos por el chaneque y una antorcha en su mano izquierda.

Con la otra mano extendida, me ofreció un collar.

Iluminando el suelo, de nuevo observé el circulo, pero ahora, estaba completo. Intacto. De un perfecto color blanco.

Con la mirada, el chaneque me exhortó a que volteara sobre mi hombro, donde un niño me dijo

"El camino no es malo ni bueno. Es naturaleza. Cuando camines, tendrás miedo, pero confía en que tu alma y tus antepasados, te guiarán. Si haces esto, tu vida tendrá equilibrio. El ocelote puede matarte o guiarte. Tu decides"

Voltee a ver al chaneque, pero su luz se extinguió de repente. No pude ver más.

Sentí como alguien me tomaba del hombro. Abrí mis ojos y de nuevo era de día. La mano que me sacudía, era la de nuestro guía, quien me dijo "No se pierda, amigo. En esta selva, es muy fácil que se pierda uno".

Aún no lo puedo explicar.

A nuestro regreso, algunas personas se quejaron de que no pudieron ver nada. Otros, regresaron mudos, sudando temblorosos sin motivo aparente.

Yo no puedo decir exactamente que sucedió. Lo único que sé, es que cuando a veces me siento perdido y sin rumbo, volteo a mi mesa de noche y observo un collar que no recuerdo haber comprado... y me siento tranquilo de nuevo.

Para mi esposa, quien es mi camino y mi collar. –José Borbon.