La película de terror de los 90, The Craft considerada parte del cine de culto, tendría planes para convertir el clásico de terror en un musical de Broadway.
El coguionista del filme, Peter Filardi, cuenta a Bloody Disgusting:
"Realmente empezamos a discutirlo. [The Craft] era mi historia y obtuve el crédito de la historia, lo que me da algo llamado derechos separados, que cubren el teatro. ¡Ni siquiera lo sabía!
“Estas personas con un historial de hacer musicales de Broadway se acercaron a mí y me preguntaron si tenía los derechos y si estaba interesado. Una vez que los abogados determinaron que yo tenía los derechos, dije: ‘Definitivamente estoy interesado’. Les acabo de dar un acuerdo de compra gratuita y van a intentar establecerlo”.
"Me encantaría que sucediera".
“Me siento honrado de que alguien quiera reinterpretar mi trabajo de una manera diferente. Estoy completamente abierto a lo que cualquiera haga con él. No soy particularmente valioso por ninguno de mis trabajos. Tuve mi oportunidad y estoy feliz de ver a otros tomar el balón y correr. Incluso si se convirtiera en algo fuera de Broadway, también sería divertido para mí. ¡Dedos cruzados!"
Jóvenes Brujas (por su título en nuestro país) es una película de terror lanzada en 1996, dirigida por Andrew Fleming quien coescribió el guion junto a Peter Filardi, y contó con Robin Tunney, Fairuza Balk, Neve Campbell y Rachel True como elenco principal.
Su trama se centra en el personaje interpretado por Tunney. Ella es una chica con problemas recién llegada a la ciudad y a una preparatoria católica, quien hace amistad con un trío de marginadas (Balk, Campbell, True). Ellas practican brujería, siendo el personaje de Balk, la líder. Pronto, las cuatro conjuran varios hechizos y maldiciones en contra de aquellos quienes les hacen pasar malos momentos. Y aunque en un inicio parece ser diversión “inocente,” no pasa mucho tiempo para que las cosas den un giro hacia lo peor y lo más oscuro.
Filarde cree que la razón de que la película continúe como una de las favoritas de la audiencia, es su temática:
“Creo que es la temática. Se trata de ser un outsider y encontrar una voz. Cuando hablé de esto por primera vez con los productores, pensaban que las brujas serían las dueñas de la escuela, como algo del tipo Lost Boys. Yo tenía una mentalidad completamente diferente. Simplemente sabía que, históricamente, la magia, la brujería y la Wicca eran armas de la clase baja. Son el último recurso de las personas que no tienen un rey, un ejército o una iglesia detrás de ellos. Son la gente del páramo, por lo que recurrirían a la magia y la brujería. Ese es el tipo de persona que me sentía en la escuela secundaria”, se ríe.
“Creo que la magia en general funciona mejor cuando hay una necesidad real; una necesidad emocional. Es el poder del dolor adolescente. Y creo que es por eso que resuena: porque eso nunca desaparecerá.”