En el cine, como en todas las actividades, el talento y la habilidad para vender tu trabajo es muy importante, pero el tener los contactos adecuados puede hacer también la diferencia. A lo largo de la historia, hemos encontrado muchas personas que, gracias a las relaciones familiares, han podido irse colando dentro del medio. Pero como siempre, eso puede colarte adentro, pero si no tienes como sostenerlo, no durarás mucho.
Al igual que en otras actividades, existen dinastías que tienen más de un nombre dentro del medio, y que por gracia de la genética, muchos comparten el talento del mismo. Nombres como los Sheen/Estevez, los Barrymore y los Coppola, tienen ya un nombre bien establecido dentro del cine. En el caso de este último, tenemos que mencionar el caso de Nicolas Cage, que se puso ese apellido precisamente para que el nombre Coppola no pesara demasiado en su carrera.
Por otro lado, existen casos en donde dos hermanos u otros parientes comienzan al mismo tiempo, y se hacen de un nombre en conjunto. Los Cohen y los Belushi son dos de los ejemplos más notables de este caso.
Otra situación muy particular es cuando los hijos no sólo no reciben apoyo de sus padres, sino que ellos se oponen a que sigan esa carrera. Es la situación que vivió Asia Argento, reconocida actriz y directora que triunfó a pesar de que su padre no deseaba que siguiera esa profesión.
Uno de los casos más dramáticos de este tipo fue el de Cheyenne y Christian Brando, que a pesar del apoyo y empuje de su padre, no alcanzaron a triunfar al mismo nivel. Este caso es muy similar al que en este momento vive Jaden Smith.
Y por último, y que han sido unos de los casos más curiosos, es cuando los hijos han superado la fama y reconocimiento de los padres, como pasó con Lon Chaney Jr. y Robert Downey Jr., cuya reputación supera a la de sus progenitores.
¿Qué otros casos recuerdas?