Este término se utiliza con frecuencia, aunque de modo incorrecto, como un hipérbole para describir una cinta especialmente buena, en realidad se trata de un género en sí mismo, que si bien no es muy frecuente, tiene una cantidad suficiente de producciones para ser representativo.
Se le llama de esa forma a aquellas cintas formadas de varias historias independientes, usualmente con un punto temático en común. Si bien es usual que exista un director diferente por secuencia, existen algunas realizadas por uno solo.
Usualmente, existen tres formas diferentes en que se construyan este tipo de cintas, dependiendo del objetivo original del mismo.
Historia tronco: Existe una historia sencilla que sirve de enlace a todas ellas. Puede ser desde un narrador único, o algún elemento común. El mejor ejemplo es Reportaje, de 1953.
Historias entrelazadas: Si bien las historias son independientes, existen momentos en que comparten puntos, incluso a veces tan sencillo como ver pasar al protagonista de una de ellas por la calle, hasta compartir algún personaje común. Este tipo de narración lo vemos en Trick or Treat.
Historias Independientes: Cada narración se da de manera separada, sin puntos de unión o continuidad entre las misma. Dentro de esta lógica se realizó New York, I Love You.
Existen una gran cantidad de excelentes cintas antológicas, muchas de ellas muy recomendables.