A menudo, los amantes del terror, el gore y lo creepie, somos catalogados como freaks e inadaptados, raros, quizás en el mejor de los casos. Nuestro gusto por el lado oscuro de la vida nunca es del todo bien aceptado, aunque demos las explicaciones más profundas que se nos ocurran para justificar la afición por sentir miedo profundo en las entrañas, ya sea por medio del cine o la literatura.
El subgénero zombie dentro del cine de horror, es quizás uno de los más complejos, ya que combina elementos de otras criaturas terroríficas, que tienen un buen lugar ganado en el imaginario de las pesadillas colectivas, como los vampiros, las brujas, los fantasmas o los hombres lobo. Los zombies son un raro híbrido entre los que vuelven a la vida (como los fantasmas y vampiros) pero carentes de alma, voluntad, un cuerpo corrompido y un instinto salvaje (como el de los hombres lobo) en medio de una falta de conciencia demencial.
En el filo del fin del mundo, casi siempre en escenarios apocalípticos, los zombies le devuelven al cuerpo su carácter frágil y perecedero, sin alma, raciocinio, ni corazón. Locura y sangre con un muy marcado toque gore, que los hace absolutamente fascinantes.
Es así, que en un afán lúdico, familiar y divertídisimo, miles del fans del género tomaron las calles de la Ciudad de México, en lo que ya se perfila como la más grande marcha Zombie Walk hasta ahora. Los organizadores afirman que el record lo tenía Seattle con 4,233 zombies en las calles, pero México llegó a los ¡6000! Lo cual muestra que estas manifestaciones solo pueden ocurrir en la segunda ciudad más grande del mundo.
Los Zombies además hicieron gala de civilidad respetando el decálogo Zombie al 100%
Un Zombie es Tolerante: Un Zombie no agrede a otro Zombie.
Un Zombie no Discrimina: Muerde humanos parejo
Un Zombie es Incluyente: Un Zombie no mata, solo hace nuevos Zombies
Todo un espectáculo ver a cientos de personas diviérténdose juntas. Ojalá se repita con tanto éxito el próximo año. Mientras una galería de fotos, si alguien se reconoce, ¡manifiéstese!
