Los derechos para realizar adaptaciones cinematográficas y televisivas de Sin City, el mundo oscuro y ultraviolento de la novela gráfica creada por Frank Miller en 1991, está de regreso en manos de su creador gracias al acuerdo por la venta de The Weinstein Company a Lantern Capital Partners (vía THR), valorada en $289 millones de dólares, luego de que TWC tuviera que declararse en bancarrota en un acto seguido al escándalo por acoso y abuso sexual de su cofundador, Harvey Weinstein.
Con Weinstein en caída libre, y Miller en contra de que Lantern retuviera su trabajo, luchó por recuperar los derechos de su propiedad, incluyendo los derechos televisivos de la serie de televisión que preparaba Dimension Films –división de TWC– así como los derechos de la adaptación cinematográfica Sin City (2005) codirigidas por Miller y Robert Rodriguez. La adaptación fue producida por Weinstein Co.
OJO: El acuerdo entre Miller y Lantern, no incluye la obtención de los derechos de la secuela Sin City: A Dame to Kill For (2014), también codirigida por Miller y Rodriguez. Aunque esto no debería preocuparle mucho al realizador, pues la película no fue muy bien recibida. Mientras la original recopiló $158 millones de dólares a nivel mundial, a partir de un presupuesto de $40 millones de dólares, la secuela recopiló $39 millones de dólares en taquilla mundial, con un presupuesto de $65 millones de dólares.
Ambos largometrajes fueron financiados por los hermanos Weinstein, el primero fue distribuido por Miramax, el segundo por TWC. La compañía además retenía los derechos de la serie de televisión en desarrollo.
En resumen, el convenio entre el cineasta y Lantern significa que Miller tiene de vuelta los derechos de la película original, de la serie en desarrollo, y de futuras adaptaciones cinematográficas y televisivas. Esto también puede implicar que Miller podría asumir los deberes en solitario del desarrollo de sus propiedades, eliminando intermediarios, en especial si planea ofrecer una posible serie de televisión a los diversos servicios de streaming que están interesados en contenido de cómics.
Otro detalle a destacar, es que siempre es algo positivo que un creador tenga los derechos de sus propiedades.
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