Este martes 25 de septiembre, la Corte de Montgomery County emitió sentencia a Bill Cosby, tras ser declarado culpable el pasado mes de abril, de tres delitos por agresión indecente agravado, por los hechos suscitados en el caso de Andrea Constand –exempleada de la Universidad de Temple, en Filadelfia, Pensilvania– en enero de 2004.
Los cargos son los siguientes: penetración sin el consentimiento de Constand; penetración mientras ella estaba inconsciente; y penetración tras haber sido drogada. Cada uno de los cargos acarrea una pena máxima de 10 años de cárcel y una multa de $25,000 usd.
La sentencia de Cosby, de 81 años, fue dada a conocer finalmente este día: el actor pasará de tres a diez años tras las rejas, convirtiéndose en la primera celebridad en la era #MeToo en ser enviada a prisión.
Al dictar la sentencia, el juez Steven O’Neill se refirió a Cosby con las siguientes palabras:
“Es momento de que se haga justicia. Sr. Cosby, todo esto ha dado vuelta y regresó a usted. El momento ha llegado.”
O’Neill sentenció a Cosby a “encierro total,” en una prisión estatal, y lo multó con $25,000 usd. También se refirió a la antigua estrella televisiva como un “depredador sexual violento.” Cosby tendrá que asistir a terapia mensualmente por el resto de su vida. Asimismo, vecinos y escuelas, deben estar al tanto y ser notificados de su paradero en todo momento.
Los abogados del actor pidieron que su cliente permaneciera en libertad bajo fianza, sin embargo, el juez O’Neill aclaró que no daría a Cosby algún tipo de trato especial o diferente a los demás, y que fuera "encerrado de inmediato."
Cosby declinó hablar previo a su sentencia. Posteriormente, intercambió algunas palabras con su vocero y abogado. Su esposa, no se encontraba en la corte. Andrew Wyatt, su vocero, se refirió al proceso judicial como "el juicio más racista y sexista en la historia de los Estados Unidos."
Wyatt agregó que tanto Cosby como el juez Brett Kavanaugh, son víctimas de una "guerra sexual," en Washington, de la que el Juez O'Neill forma parte.
Como mencionamos anteriormente, tanto el veredicto de culpabilidad, como la sentencia contra Cosby, son los primeros de una celebridad acusada de agresión sexual desde el inicio del movimiento #MeToo en octubre de 2017, cuando las piezas de investigación conducidas por el New York Times y el New Yorker, destaparon los abusos del antiguo magnate de Hollywood, Harvey Weinstein, abriendo las puertas para que cientos de mujeres dentro de la industria cinematográfica, televisiva, musical, y tantas más, compartieran valientemente sus relatos de abuso.
Cosby debe cumplir un mínimo de tres años antes de ser elegible para solicitar libertad condicional.
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